WASHINGTON 10 Dic. (Reuters/EP) -
El tipo más común de tumor cerebral maligno infantil, el meduloblastoma puede consistir en dos tipos de cánceres distintos lo que, según sugieren investigadores de Hospital de Investigación Infantil St Jude, en Memphis (EEUU), podría ser positivo en su tratamiento ya que podría curarse con tratamientos menos agresivos.
Según informan en la última edición de 'Nature', aunque se trata de una enfermedad que suele ser curable, los niños pueden sufrir toda la vida los efectos del tratamiento, que incluye cirugía, quimioterapia y radiación.
Aunque los investigadores han señalado que se requieren más estudios para confirmar qué tratamiento es el mejor, la investigación realiza en ratones ha demostrado que, además de que se trata de dos formas diferentes de cáncer, "requiere menos tratamiento", ha explicado el coordinador del equipo internacional investigador, el doctor Richard Gilbertson.
"Hace 10 años, el meduloblastoma era considerado una sola enfermedad y todos los niños con este tumor cerebral recibían el mismo tratamiento. Este estudio muestra claramente que hay subtipos diferentes de este cáncer que provienen de tipos celulares susceptibles específicos en el cerebro que adquieren mutaciones puntuales", explica Gilbertson.
Los hallazgos "tienen implícitas profundas para la investigación futura y el tratamiento de este cáncer infantil importante", señala. El equipo diseñó genéticamente ratones que desarrollaron estos tumores después de nacer y los estudiaron. Los diferentes tipos tumorales comenzaron en lugares levemente distintos e involucraron diferentes células.
No es el primer estudio que descubren la complejidad de este cáncer, y que existen dos actividades distintas en los tumores meduloblastomas: una desarrollada a través del sendero genético llamado 'wingless' o WNT, y la otra por el gen apodado 'sonic hedgehog' o SHH.
El tipo de tumor SHH afecta más comúnmente a los niños muy pequeños, que tienen una tasa de supervivencia del 80 por ciento. "Los meduloblastomas WNT son sorprendentemente diferentes. Con aparición en niños mucho mayores, estos tumores altamente curables tienen una morfología 'clásica'", explican.