El Esófago de Barret tratado con cirugía laparoscopia ayuda a prevenir el cáncer de esófago

Actualizado: sábado, 21 abril 2012 14:00

MADRID 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

El jefe de la Unidad de Cirugía Metabólica y de la Obesidad del Hospital USP San Camilo de Madrid, el doctor Alfredo Alonso Poza, ha destacado este viernes que la cirugía laparoscopia es una técnica minimamente invasiva, que es utilizada, entre otros campos, para tratar el Esófago de Barret y, con ello, prevenir la aparición del cáncer de esófago, y para abordar problemas colorrectales.

Este experto ha realizado estas declaraciones a Europa Press, a propósito de su participación en el próximo Congreso Mundial de la Cirugía Endoscópica, que se celebra del 23 al 27 de abril en Puerto Vallarta (México), y en el que intervendrá en las mesas de 'Hidatidosis Abdominal y Laparoscopia; 'Evolución del Esófago de Barret tras la Cirugía'; y 'Cómo evitar las complicaciones en la Cirugía Laparoscopica Colorrectal'.

Además, junto con colegas internacionales, Alonso Poza elaborará una serie de recomendaciones en torno a la cirugía de la obesidad mórbida o de la diabetes resistente a la insulina.

En este sentido, ha explicado que existen individuos que presentan una obesidad derivada de "grandes comilonas"; "picadores crónicos" o "comedores de helados y batidos" y que, en función de la tipología que presenten, seguirán un procedimiento u otro.

De este modo, la cirugía indicada para las personas que cuentan con una obesidad leve es la gastrectomía; para las que tengan un Índice de Masa Corporal (IMC) situado entre el 45 y 55, un 'bypass' gástrico; y para las obesidades mórbidas --un IMC superior a 55--, un 'switch' duodenal.

ESÓFAGO DE BARRET

La cirugía laparoscopia está indicada para abordar el Esófago de Barret --un cambio anormal de las células del esófago que puede generarse tras la exposición al ácido estomacal--, que puede derivar, ha advertido Alonso Poza, en un cáncer de esófago.

Esta patología que, por lo general, se produce en personas que padecen la enfermedad por reflujo gastroesofágico, tiene por tratamiento la administración de inhibidores de la bomba de potrones, aunque "el tratamiento quirúrgico logra mejores prevenciones" del cáncer, ha precisado este profesional.

Por otro lado, Alonso Poza ha reconocido la labor de la laparoscopia en la hidatidosis hepática, también conocida como el 'quiste de perro', una enfermedad que suele aparecer, "en la actualidad con menos frecuencia que antes", en el mundo rural.

De esta manera, ha concretado que, con esta técnica quirúrgica, que supone introducir una lámpara en el abdomen, se pueden "hacer pequeñas incisiones con las que tratar el quiste".

Por otra parte, durante el congreso, expertos internacionales abordarán cómo evitar las complicaciones en la cirugía laparoscopia colorrectal. En esta línea, ha asegurado que el tratamiento del cáncer de recto mediante está técnica es más "complicado" que hacer una incisión abierta, puesto que hay que realizar "movimientos contrarios e inversos".

No obstante, Alonso Poza ha asegurado que, con este tipo de cirugía, el paciente "evita infecciones y hernias"; experimenta "menos dolor"; obtiene el alta más rápido e, incluso, evita su paso por la Unidad de Cuidados intensivos (UVI).