MADRID 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
En España, el 9 por ciento de la población adulta padece la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), porcentaje que supone al Gobierno 3.000 millones de euros anuales en tratamientos, el 2 por ciento del presupuesto del Ministerio de Sanidad y Consumo, según datos de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
La EPOC es una enfermedad que, según la sociedad médica, afecta al individuo, a la familia y a la sociedad. En sus fases finales, la enfermedad "es altamente demandante" de asistencia social y sanitaria por la incapacidad física que puede llegar a producir en los pacientes y el incremento del número de exacerbaciones graves que se produce en estas fases.
Además, la SEPAR destaca el elevado coste económico de la enfermedad, que incluye los gastos directos que provoca la medicación, la hospitalización y otros cuidados sanitarios, así como los costes indirectos motivados por las bajas laborales de los pacientes o de los familiares que deben permanecer a su cuidado.
En España, tal y como recoge el doctor Francisco Pozo, neumólogo miembro de SEPAR y médico adjunto del Servicio de Neumología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, "la EPOC supone un coste directo anual de 3.538 euros por paciente, con un 84 por ciento imputable a ingresos hospitalarios. Provoca entre el 10 y el 12 por ciento de las consultas en los centros de atención primaria y unos 100.000 ingresos hospitalarios, que alcanzan entre el 7 y el 8 por ciento del total de los que se producen en España".
Los síntomas de la EPOC se confunden con los del envejecimiento natural. Esto supone que el afectado compre más tratamientos anti envejecimiento y le suba la "cesta de la compra". "Esta es una de las causas del infradiagnóstico de la EPOC, la gente se cree que es el envejecimiento natural del ser humano y compra tratamientos que no le valen para mucho" considera el doctor Julio Ancochea, Presidente de SEPAR. "Las personas mayores de 40 años que sufren tos, expectoración y dificultad para respirar, y son fumadores o han fumado, deberían acudir a su médico y realizar una espirometría para descartar que sufren esta enfermedad pulmonar", recomienda.
En España, fuma más del 34,4 por ciento de la población desde los 16 años, según los últimos datos disponibles de la Encuesta Nacional de Salud de 2001, siendo el rango de edad que va desde los 16 a los 25 años el de mayor prevalencia y las mujeres las que más fuman, un 42,7 por ciento frente a un 40,8 por ciento de hombres. Esto supone un gasto por persona enorme tanto en tabaco como en posteriores tratamientos clínicos.
Asimismo, estos datos sitúan a España en los primeros puestos del ránking mundial de tabaco consumido por mujeres. En el rango de edad entre los 25 y los 44 años, casi la mitad de la población española es fumadora y a partir de los 44 años, esta estadística muestra que mientras los hombres abandonan el tabaco, las mujeres siguen fumando con porcentajes de consumo superior al de los hombres.