MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
La condición neurológica de la epilepsia no está directamente asociada con un mayor riesgo de cometer delitos violentos; sin embargo, existe un riesgo mayor de cometer crímenes violentos en personas que han sufrido lesiones cerebrales traumáticas, según un estudio sueco dirigido por Seena Fazel, de la Universidad de Oxford, en el Reino Unido, y sus colaboradores del Instituto Karolinska, y los servicios de prisiones y libertad condicional suecos. El estudio ha sido publicado en 'PLoS Medicine'.
En su estudio, los autores identificaron a todas las personas con epilepsia y lesiones cerebrales traumáticas registradas en Suecia entre 1973 y 2009 y emparejaron cada caso con diez personas de la población en general sin estas enfermedades; posteriormente, vincularon estos datos a los registros de todas las condenas por delitos violentos.
Usando estos métodos, los autores observaron que el 4,2% de las personas con epilepsia tenían, al menos, una condena por violencia después de ser diagnosticados, en comparación con el 2,5% de la población en general. Sin embargo, después de analizar la situación familiar (a las personas con epilepsia en comparación con sus hermanos no afectados), la asociación entre el ser diagnosticado con epilepsia y ser declarado culpable de crímenes violentos, desapareció. Por otro lado, los autores descubrieron que se mantuvo una asociación entre padecer una lesión cerebral traumática y cometer un crimen violento.
Según los autores, con más de 22.000 personas con epilepsia o con lesiones cerebrales, la muestra es 50 veces mayor a las utilizadas en anteriores estudios relacionados con la epilepsia, y más de 7veces mayor que los anteriores estudios sobre lesiones cerebrales. Los expertos sugieren que la falta de una asociación causal entre la epilepsia y el crimen violento puede ser valiosa en la lucha contra una de las causas del estigma asociado con esta condición. Por otro lado, la detección y una mejor gestión de algunos pacientes y reclusos con lesiones cerebrales traumáticas podrían reducir las tasas de delincuencia.
En un comentario anexo, el psiquiatra Jan Volavka, profesor emérito de la New York University School of Medicine (no involucrado en la investigación), afirma que, "comparar el porcentaje de condenas antes y después del diagnóstico daría otra perspectiva sobre el efecto de la enfermedad en los delitos violentos; sin embargo, uno de los puntos fuertes del estudio es el tamaño de la muestra, que comprende a toda la población de Suecia, y el seguimiento de 35 años. Los resultados son de gran importancia para la salud pública y sirven de inspiración para futuras investigaciones".