SANTA CRUZ DE TENERIFE 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Enjuagarse la boca con un colutorio a base de fluoruro sódico, al menos una vez al día, protege en un 50% frente a la aparición de nuevas caries, según el Colegio de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife, que advierte que el enjuague bucal no sustituye en ningún caso al cepillado de los dientes, pero sí puede ayudar a mantener las encías limpias y saludables.
Al escoger un enjuague bucal, según la entidad colegial, hay que fijarse en la composición de los mismos para saber si cumple con los objetivos que se quieren obtener. En este sentido, el dentista podrá aconsejar sobre el mejor colutorio en cada caso y la frecuencia de uso del mismo.
Por regla general, los enjuagues bucales se utilizan bien para reforzar el esmalte de los dientes frente a las caries, bien para controlar las bacterias que las producen, así como enfermedades de las encías.
Si lo que el usuario desea es reforzar el esmalte frente a la agresión de los ácidos, el enjuague escogido deberá llevar flúor en sus diferentes presentaciones. Para la sensibilidad de los dientes al frío, el colutorio deberá contener nitrato potásico.
INNOVACIÓN
En el control de las baterías se ha ido avanzando en la formulación de los enjuagues. Para el Colegio de Dentistas, el componente que se considera como "patrón oro" es la clorexidina, que es la más efectiva contra el llamado biofilm oral (placa bacteriana), pero que presenta algunos efectos secundarios molestos como cambios en el sabor de los alimentos.
De hecho, destaca que las empresas españolas son punteras en la investigación de aceites esenciales y del cetilperidinio, entre otros productos, para crear nuevas formulaciones de enjuagues bucales que ayuden en el control de patologías como las infecciones de las encías, el mal aliento o las caries.
Las bacterias que se organizan en biofilms son estructuras más antiguas que los mamíferos y se pueden encontrar en multitud de lugares cotidianos, como las paredes de dormitorios y las piezas sanitarias de los baños. Con miles de años de evolución, estas bacterias han desarrollado sistemas de protección que las han convertido en resistentes a diferentes compuestos químicos, explica el Colegio.
De ahí que la higiene diaria bucal, según los dentistas, no deba depender solo del cepillado, sino que sea recomendable utilizar también cepillitos interdentales, seda dental y raspadores linguales que ayudan a romper la estructura de estas comunidades microscópicas, para que los agentes químicos puedan ejercer su función bactericida.