MADRID 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez Raya, ha pedido la implicación de los pacientes en las estrategias de segurida, y solicita a las autoridades sanitarias nacionales y autonómicas que se tenga en cuenta a los pacientes en todas las políticas y estrategias relacionadas con su seguridad.
"Estamos hartos de escuchar que se debe poner al paciente en el centro del sistema y, sin embargo, realmente seguimos actuando con la idea de hacerlo todo por el paciente, pero sin el paciente", ha señalado con motivo del día mundial de la Seguridad del Paciente, celebrado este pasado domingo.
Para este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elegido el tema '¡Demos voz a los pacientes!', por el que la pide a todas las partes interesadas que adopten las medidas necesarias para garantizar la implicación de los pacientes en la formulación de políticas, su representación en las estructuras de gobernanza y su participación en el diseño conjunto de estrategias de seguridad, así como que adopten un papel activo en los cuidados que reciben.
"En pleno siglo XXI ya es hora de cambiar esta esta concepción arcaica y para ello es preciso ir más allá de los mecanismos actuales de participación de las asociaciones de pacientes en la toma de decisiones políticas y lograr que su intervención influya de verdad en todos los entornos y a todos los niveles de la atención de la salud con miras a mejorar la seguridad de la atención que se presta a los ciudadanos", señala el presidente de los enfermeros.
La seguridad del paciente se define como la ausencia de daños prevenibles en los pacientes y la reducción hasta un mínimo aceptable del riesgo de causarles innecesariamente daños al atenderlos. Sin embargo, según la OMS la mitad de los daños prevenibles asociados a la atención sanitaria tienen que ver con errores en la prescripción de medicamentos: uno de cada 30 pacientes sufre daños como consecuencia de los medicamentos que toma.
Otros riesgos para la seguridad del paciente asociados a la atención sanitaria son errores en las intervenciones quirúrgicas, infecciones adquiridas en los centros sanitarios, errores diagnósticos, caídas, úlceras por presión o errores relativos a la identificación de pacientes, entre otros.