MADRID, 19 Dic. (EUROPA PRESS) -
Cirujanos estadounidenses que operaban a un bebé de un tumor cerebral encontraron que dentro de la cabeza del pequeño Sam Esquibel, de tres días, hallaron un pie perfectamente formado, así como la formación parcial de otro pie, una mano y un muslo.
Los doctores operaron a Esquibel después de descubrir lo que parecía ser un tumor microscópico tras realizarle una resonancia magnética, pero mientras extirpaban este tumor encontraron el hallazgo que atribuyeron a un caso de "feto dentro del feto" en el cual un gemelo comienza a formarse dentro de su hermano, según informa la BBC.
Sin embargo, el equipo médico del Memorial Hospital en Colorado aseguró que estos casos suceden de forma muy extraña en el cerebro y que también puede haber sido un tipo de tumor cerebral congénito, aunque estos tumores no suelen suponer el crecimiento de un pie o una mano, según los médicos.
El doctor Paul Grabb, cirujano pediátrico, señaló que Sam se curó después de someterse a la operación, el pasado mes de octubre. "Parecía un parto de nalgas de un bebé, saliendo del cerebro", manifestó Grabb. "Encontrar una estructura perfectamente formada (como esta) es extremadamente único, inusual, sin precedentes", aseguró.
Los padres de Sam, Tiffnie y Manuel Esquibel, declararon que su hijo se encuentra en casa pero se enfrenta a análisis de sangre mensuales para comprobar si hay señales de cáncer o de regeneración, junto con una terapia física para mejorar el movimiento de su cuello, aunque aseguraron que se ha recuperado prácticamente de la intervención. "No podría saberse a no ser por la cicatriz que tiene allí", afirmó su madre.
Un miembro de la organización Tumor Cerebral de Reino Unido, Trevor Lawson, manifestó que incluso con las técnicas más modernas, "los cirujanos no pueden estar totalmente seguros de lo que encontrarán cuando entran en un cráneo". "Aún así, es un caso excepcionalmente raro", aseveró Lawson.
"Es bueno saber que Sam se está recuperando bien, ya que los tumores cerebrales matan ahora a más niños que ningún otro cáncer sólido y es esencial que se realice una mayor investigación para identificar cuál es su causa", opinó Lawson.
"Donde se obtiene el consentimiento apropiado, los sucesos extraños como estos pueden dar en ocasiones un material genético inapreciable que daría a conocer el origen de estos tumores traumáticos", señaló.