MADRID, 2 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad Médica de Viena (Austria) han realizado una revisión sistemática en la que ofrecen por primera vez un análisis en profundidad del riesgo de trombolia venosa (TEV) en pacientes hospitalizados por COVID-19. Mientras que los pacientes hospitalizados en salas generales tienen un riesgo de TEV entre el 5 y el 11 por ciento, el riesgo de desarrollar trombosis venosa profunda o embolia pulmonar en pacientes en estado crítico es del 18 al 28 por ciento.
En su revisión, publicada en la revista científica 'Research and Practice in Thrombosis and Haemostasis', los autores evaluaron un total de 5.951 estudios publicados en el campo de la TEV en COVID-19. De ellos, 86 estudios se consideraron elegibles para su inclusión y reportaron tasas de trombosis y embolia pulmonar en pacientes de COVID-19. Tras excluir los estudios adicionales debido al riesgo subyacente de sesgo en una evaluación estructurada, se encontró que 66 estudios (28.173 pacientes) reunían las condiciones para realizar un metanálisis que proporcionara una estimación sólida del riesgo de TEV en COVID-19.
Los principales resultados son los siguientes: el riesgo general de TEV en los pacientes hospitalizados con COVID-19 es del 14 por ciento, a pesar de los rigurosos regímenes de tromboprofilaxis de la mayoría de los estudios. Además, se encontró una alta heterogeneidad en las tasas de TEV entre los diferentes subgrupos de pacientes. La tasa fue más alta en los pacientes admitidos en las unidades de cuidados intensivos, con un 23 por ciento de los pacientes que sufrieron TEV. Los pacientes en salas generales sufrieron TEV en el 8 por ciento de los casos.
Además, los autores se centraron específicamente en estimar el riesgo de una embolia pulmonar potencialmente mortal. El resultado: "Este riesgo es considerablemente más alto que en otras enfermedades médicas graves comparables y oscila entre el 10 y el 18 por ciento en los pacientes de COVID-19 que requieren cuidados intensivos. Además, sorprendentemente, se detectó una trombosis venosa profunda en casi la mitad de los pacientes hospitalizados de COVID-19 que habían sido sistemáticamente examinados para detectar la trombosis mediante ultrasonido".
Estos hallazgos subrayan el fuerte impacto de COVID-19 en el sistema de coagulación de la sangre. Además, un análisis exploratorio reveló que los pacientes que desarrollaron trombosis venosa profunda o embolia pulmonar durante la hospitalización tenían concentraciones significativamente más altas de dímeros D en el momento de la admisión, un parámetro de laboratorio que indica un sistema de coagulación activado. Este hallazgo podría utilizarse para ayudar a desarrollar estrategias de tromboprofilaxis personalizadas y de riesgo estratificado en el futuro.