MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) y la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) aconsejan que las futuras campañas de vacunación contra la Covid-19 antes de la próxima temporada de frío prioricen a las personas que tienen más riesgo de tener una enfermedad grave.
Este grupo incluye personas de 60 años o más, personas con sistemas inmunológicos debilitados y condiciones subyacentes que los ponen en mayor riesgo de Covid-19 grave, independientemente de la edad, y aquellas que están embarazadas. También recomiendan que se considere la vacunación de los trabajadores de la salud debido a su probable mayor exposición a nuevas oleadas de SARS-CoV-2 y su papel clave en el funcionamiento de los sistemas de atención médica.
Asimismo, recuerdan que la vacunación oportuna antes de un posible aumento repentino de casos de Covid-19 en otoño e invierno de 2023 es esencial para proteger a las personas de la infección grave y a los sistemas de salud para que no se vean abrumados.
ACTUALIZAR LA COMPOSICIÓN DE LAS VACUNAS DEL COVID-19
Las vacunas actualmente autorizadas continúan siendo efectivas para prevenir la hospitalización, la enfermedad grave y la muerte por Covid-19. Sin embargo, la protección contra el virus disminuye con el tiempo a medida que surgen nuevas variantes del SARS-CoV-2.
De acuerdo con el resultado de las reuniones recientes de los reguladores internacionales y la Organización Mundial de la Salud , el Grupo de trabajo de emergencia de la EMA recomienda actualizar las vacunas para atacar las cepas XBB (un subgrupo de Omicron), que se han vuelto dominantes en Europa y otras partes del mundo.
La EMA y el ECDC también señalan que las vacunas monovalentes (vacunas dirigidas solo a una cepa, como XBB.1.5) son una opción razonable para brindar protección contra las cepas emergentes y dominantes actuales.
Asimismo, recuerdan que las personas con sistemas inmunitarios debilitados pueden necesitar dosis adicionales de acuerdo con las recomendaciones nacionales. Y que, para las revacunaciones, debe respetarse un intervalo mínimo de tres meses, aunque se puede considerar un intervalo de cuatro meses entre dosis a la luz de la evidencia que muestra un alto nivel de protección contra la enfermedad grave cuatro meses después de la vacunación.