El síndrome metabólico puede provocar enfermedad renal

Actualizado: viernes, 19 agosto 2011 16:08

MADRID, 19 Ago. (EUROPA PRESS) -

Las personas que sufren el síndrome metabólico tienen más riesgo de desarrollar la enfermedad renal, según un estudio publicado en ' Clinical Journal of the American Society Nephrology' (CJASN).

El síndrome metabólico está compuesto por un grupo de desórdenes médicos que aumentan en los pacientes que lo padecen el riesgo de diabetes, enfermedades del corazón, ictus y una muerte prematura cuando todo ello se combina.

Un paciente es diagnosticado con este síndrome cuando muestra tres o más de las siguientes características: alta presión arterial, azúcar en la sangre, exceso de peso en el abdomen, un colesterol bueno bajo y altos niveles de ácidos, factores que pueden contribuir a desarrollar la enfermedad renal.

El doctor de la Clínica Cleveland, Sankar Navaneethan, y sus compañeros de investigación analizaron 11 estudios que versaban sobre la relación entre el síndrome metabólico y la enfermedad renal. En total, se incluyeron en la investigación 30.416 personas de diferentes grupos étnicos.

Los datos revelaron que las personas con síndrome metabólico tienen un 55 por ciento más de probabilidades de desarrollar problemas renales, especialmente en la función renal inferior, indicativo de la enfermedad renal.

Los componentes individuales del síndrome metabólico están vinculados con el desarrollo de la enfermedad renal. Es decir, se ha demostrado que el riesgo de enfermedad renal aumenta a medida que el número de componentes del síndrome metabólico aumenta.

"Los médicos de atención primaria deberían considerar usar el síndrome metabólico como un marcador para identificar pacientes con mayor riesgo de desarrollar enfermedad renal", dijo el Dr. Navaneethan.

Para prevenir y controlar el síndrome metabólico, los expertos aconsejan seguir una dieta saludable, hacer ejercicio, bajar el exceso de peso, así como reducir el colesterol, la presión arterial o el azúcar en la sangre para ayudar a prevenir la enfermedad renal.

Los estudios clínicos previos han examinado los efectos de algunas de estas medidas (como la reducción de la presión arterial y el azúcar en la sangre) en la función renal, mientras que otros (tales como los efectos del ejercicio y la pérdida de peso intencional) todavía están por estudiar.