Una prueba con escáneres de ultrasonido podría detectar a los pacientes con más posibilidades de sufrir un ictus

Actualizado: jueves, 18 agosto 2011 16:55

NUEVA YORK (ESTADOS UNIDOS), 18 (Reuters/EP)

Un nuevo test basado en escáneres de ultrasonido podría detectar a los pacientes con un alto riesgo de sufrir un ictus, según un equipo de investigadores del Academic Teaching Hospital Wagner-Jauregg, en Linz (Austria), cuyo estudio aparece publicado en la revista especializada 'Neurology'.

Cerca de 800.000 personas sufren ictus cada año sólo en Estados Unidos, de lo que cerca de la sexta parte muere por este motivo y otros quedan discapacitados.

Este trabajo pudo separar a los pacientes que tenían las arterias carótidas obstruidas en dos grupos: aquellos que eran relativamente propensos a sufrir un ictus y los que no lo eran, lo que podría ayudar a decidir qué pacientes podrían beneficiarse de una cirugía polémica, en la que los médicos eliminan las acumulaciones de colesterol que bloquean las arterias.

Según el investigador Raffi Topakian, del Academic Teaching Hospital Wagner-Jauregg, "esta investigación sugiere que es posible identificar a aquellos pocos sujetos candidatos a la cirugía carótida por su elevado riesgo, a pesar de los mejores tratamientos médicos".

"Por supuesto --dice-- todavía es pronto para ser entusiasta con estos descubrimientos, pues deben ser confirmados a través de otros estudios".

El test se basa en dos tipos de escáneres de ultrasonido: uno en las arterias carótidas que abastecen de sangre al cerebro y otro en las arterias cerebrales en si mismas. Ambas están disponibles en los hospitales, aunque el escáner cerebral debe durar cerca de una hora y no es fácil de interpretar.

En la actualidad, en Estados Unidos y Canadá muchos pacientes se someten a cirugía para limpiar los cúmulos de colesterol, a pesar de tener pocos síntomas, según explica el neurólogo de la University of Erlangen-Nuremberg (Alemania) Lars Marquardt, autor de un editorial sobre este descubrimiento.

En este estudio, un total de 428 pacientes sin síntomas con las arterias carótidas bloqueadas se sometieron a estos escáneres y su evolución fue seguida durante dos años.

De los pacientes que comenzaron mostrando señales de alarma en ambos escáneres, el riesgo anual de sufrir un ictus era del 9 por ciento. Aquellos pacientes con resultados en ambos escáneres que parecían sospechosos --mostrados por el 94% de los pacientes-- presentaban un riesgo anual menor del 1 por ciento.

Presentar las arterias carótidas bloqueadas es un factor de riesgo para el ictus. Sin embargo, muchos médicos creen que practicar una cirugía a estos pacientes es demasiado peligroso si se trata de personas sin síntomas y con un riesgo medio.

Para Marquardt, "hay un conjunto de pacientes que lo necesita y este nuevo test podrá, probablemente, ayudará a identificarlos". "Este no es un gran estudio, pero es muy prometedor", asevera.

En general, sólo un 2 por ciento de las personas sin síntomas que tienen las arterias carótidas bloqueadas sufre un ictus cada años, cuando su problema se trata con fármacos y un estilo de vida saludable. Por contra, la realización de la cirugía carótida dispara la aparición del ictus en el 3 por ciento.