NUEVA YORK (EE.UU), 30 (Reuters/EP)
Un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Boston y el Hospital Brigham and Women's, en Estados Unidos, aseguran que el consumo de 'Aspirina' (Bayer) y otros antiinflamatorios no está asociado a un mayor o menor riesgo de desarrollar cáncer de mama, según informa el 'Journal of Clinical Oncology'.
Estudios previos habían mostrado resultados contradictorios sobre los efectos del uso habitual de los llamados antiinflamatorios no esteroides (AINE), ya que en algunos casos se destacaba un cierto efecto protector y en otros se había relacionado con un ligero incremento del riesgo de padecer estos tumores.
En cambio, esta investigación ha determinado que no existen pruebas de que esos fármacos protejan a las mujeres del cáncer de mama. "Existen otras formas más convincentes de prevenirlo", ha reconocido una de las autoras de la investigación, la epidemióloga Lynn Rosenberg.
Los AINE, como el naproxeno y el ibuprofeno bloquean una enzima que controla la proliferación y la muerte celular, lo que influiría en el riesgo de desarrollar cáncer. Y el acetaminofeno o paracetamol podría reducir los niveles de estrógeno, una hormona clave para ciertas formas de tumores mamarios.
Los investigadores utilizaron datos de un estudio con más de 100.000 enfermeras de Estados Unidos que, cada dos años, habían respondido a cuestionarios sobre el uso de fármacos, enfermedades, dieta y estilo de vida.
A unas 4.700 de las 84.600 participantes que habían pasado la menopausia y no tenían cáncer al inicio del estudio se les diagnosticó cáncer de mama entre 1980 y 2008.
Sin embargo, el equipo observó que el uso regular de 'Aspirina' y otros AINE, incluido el consumo diario durante más de una década, no alteraba el riesgo de las mujeres de desarrollar la enfermedad.
Las participantes tomaron 'Aspirina' para las jaquecas, la artritis y otros dolores, o para prevenir enfermedades cardiovasculares. Las usuarias de acetaminofeno eran algo menos propensas que el resto a que se les diagnosticara cáncer, aunque no hubo relación con el tiempo del uso ni la dosis y el riesgo de desarrollar la enfermedad.
"Nuestros resultados sugieren que el uso de estos analgésicos no reduciría el riesgo de desarrollar cáncer de pecho, y tampoco se puede asegurar que el uso prolongado de los AINE no aumente el riesgo de padecer la enfermedad", han explicado los autores.