MADRID 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos (URJC), en colaboración con la Fundación Reina Sofía-Proyecto Alzheimer y el departamento de Psicología Básica de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) han detectado las áreas en el cerebro que se deterioran cuando se inicia un proceso neurodegenerativo y aparece un deterioro cognitivo leve.
"Los hallazgos son muy relevantes ya que nos dan pistas sobre la zonas del cerebro que hay que mirar para poder realizar en el futuro un diagnóstico precoz del Alzheimer", asegura Juan Antonio Hernández Tamames, director del laboratorio de Análisis de Imagen Médica y Biometría de la URJC, centro donde han sido analizadas las imágenes.
En total analizaron 40 pacientes --18 sujetos sanos y 22 con trastorno cognitivo leve-- que fueron elegidos de la muestra de 140 personas utilizadas en el estudio longitudinal de tres años de duración 'Early detection of MCI and progression to Alzheimer Disease. Analysis of MCI subtypes, markers, and risk factors'. Los pacientes con deterioro cognitivo fueron clasificados en amnésicos, no amnésicos y multidominio, es decir los que tienen problemas de amnesia y problemas en la ejecución de tareas cotidianas.
La investigación, que ha recibido el primer premio en el III World Congress on Controversies in Neurology celebrado en la República Checa el pasado mes de octubre, pone de manifiesto que en sujetos con deterioro cognitivo leve de tipo amnésico se comienza dañando el giro parahipocámpico del cerebro --una zona cercana a la memoria y los recuerdos en el cerebro--.
Sin embargo, en los pacientes que presentan un deterioro cognitivo leve no amnésico lo que primero se deteriora es el cíngulo anterior. Finalmente, en los pacientes con un deterioro multidominio se dañan ambas zonas --giro parahipocámpico y cíngulo--. Los tres hallazgos son consistentes entre sí y con los síntomas clínicos.
De acuerdo a la investigación, esto podría deberse al hecho de que el deterioro cognitivo multidominio es un estadio más avanzado del Alzheimer que puede aparecer tras un deterioro cognitivo leve, ya sea amnésico o no amnésico. Estos hallazgos, además, pueden ser fácilmente distinguidos de otras demencias que cursan con síntomas similares al Alzheimer, sin serlo, como pueden ser las demencias vasculares o la demencia de cuerpo de Lewy.