MÉRIDA 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
La "desinformación", los "mitos" o creencias "erróneas" respecto al VIH/Sida siguen generando, hoy en día, "miedo" y "rechazo social" respecto a los afectados, a pesar de que los avances en los tratamientos han convertido la infección en una enfermedad crónica.
Lo que en los años 80 era una enfermedad mortal, ha adquirido el carácter de crónica en los países desarrollados y gracias a las nuevas técnicas, con las que se ha mejorado la calidad de vida de estas personas, pero sin embargo, donde "no" se han notado cambios "significativos" es en la percepción social sobre el VIH.
Así lo ha puesto de manifiesto Marien Bautista, una de las trabajadoras sociales de la Oficina de Coordinación de VIH, en declaraciones a Europa Press, en las que también ha asegurado que la "visión" que se mantiene en la sociedad sobre las causas de transmisión del virus hace que se "estigmatice" a las personas infectadas "porque se relacionan con grupos de riesgo".
Marien lo explica recordando que en los años 80, con la epidemia, comenzó a relacionarse la infección con homosexuales, prostitución o con usuarios de drogas por vía inyectada, es decir, con "comportamientos" considerados socialmente como "inmorales".
"En muchos casos, hay quien llega a valorar que las personas que están infectadas por VIH, se lo merecen", ha resaltado. Por ello, ha incidido en la importancia de "desmitificar" que el VIH esté relacionado con grupos de riesgo, sino con "prácticas de riesgo".
LA ESTIGMATIZACIÓN LLEVA A LA DISCRIMINACIÓN
"El estigma es un proceso dinámico que devalúa a un individuo ante los ojos de los demás", ha dicho, al tiempo que ha asegurado que la "estigmatización lleva a la discriminación".
Por todo ello, desde la Oficina de Coordinación del VIH en Extremadura trabajan para "reducir el impacto negativo y social" del sida y para ello, se valen de material informativo que ayude a la población a "clarificar" cuáles son las vías de transmisión, así como desarrollando campañas de sensibilización.
En este sentido, ha explicado que en 2013 Extremadura adaptó el lema de ONUSIDA a fin de enviar un mensaje a la sociedad sobre el contagio a través de material divulgativo y los medios de comunicación que son "el mejor instrumento a la hora de difundir los mensajes". Según Marien Bautista, "lo importante es cómo hacemos las cosas para prevenir la infección".
Por otro lado, ha detallado que desde la Administración regional trabajan la "mejora" de la calidad de vida de estas personas, desde la atención sanitaria, pero también desde entidades sociales y oenegés a través de subvenciones destinada a tal fin.
Así, los pacientes infectados por VIH/sida disponen de los tratamientos gratuitos en las farmacias hospitalarias. Desde 2009 se realiza, a través del sistema sanitario público, la lipodistrofia que provocan los tratamientos retrovirales, y que es un signo "que puede llegar a estigmatizar" ha remarcado la trabajadora social.
Respecto a la intervención quirúrgica, ha indicado que, desde 2009 hasta 2014, en la región, un total de 27 personas se han sometido a esta cirugía reparadora. "Hay cuatro personas en lista de espera, y solo en 2014 se atendieron dos casos en Extremadura".
Otro de los ámbitos sobre los que también trabaja la oficina de coordinación es en los tratamientos de reproducción asistida, de tal forma que ponen a disposición de las parejas serodiscordantes tratamientos para que puedan ser padres.
"Desde que se instauró en 2005, un total de 19 parejas han acudido a este tratamiento, y en concreto en 2014, solo una pareja lo ha solicitado", ha aseverado Marien.
Asimismo, el SES también dispone de técnicas para la prevención de la infección de madres embarazadas infectadas a sus hijos, la hepatitis C, o si fuera necesario, trasplantes hepáticos, una intervención de la que no se ha dado "ningún caso" en 2014. Igualmente, en casos terminales, los pacientes cuentan con el servicio de cuidados paliativos.
INTEGRACIÓN SOCIAL Y PREVENCIÓN
Desde el punto de vista de la integración social, las personas seropositivas "en buena parte" están integradas, ha indicado Marien. Pero existe un porcentaje "significativo" que tiene "dificultad para integrarse a nivel social" por "falta" de recursos económicos, drogodependencia, gente sin hogar o con nivel educativo bajo, lo que hace, según la trabajadora social, "que dificulte su inserción normal en la sociedad".
Para este colectivo, la consejería de Salud, tiene concedidas dos subvenciones al Comité Antisida de Extremadura (CAEX) a través de las cuales, prestan servicios de atención psicológica y social, apoyo, atención hospitalaria y domiciliaria, asesoramiento judicial o laboral, entre otros.
Además, desarrollan un programa de prevención sobre VIH dirigida a la población escolarizada, colegios, institutos y campus universitarios, ya que "está demostrado", según Marien Bautista, que para trabajar el "estigma" sobre las creencias y visión del sida en la sociedad "la mejor herramienta, es la educación".
En este sentido, y en materia de prevención, ha hecho referencia a la subvención que tiene concedida a la Fundación Triángulo para desarrollar programas de prevención del contagio en el colectivo de hombre que tienen relaciones sexuales con otros hombres.
Por otra parte, la Consejería de Empleo, Mujer y Políticas Sociales cuenta con un programa de incorporación sociolaboral de personas infectadas con dificultad de integración, de manera que conviven en pisos tutelados, donde los profesionales trabajan con ellos dicha incorporación. Se trata de una medida "que hasta ahora tiene bastante buena acogida", ha destacado.
Por último, y a nivel nacional, explica Marien que una persona seropositiva "tiene la posibilidad de pedir el reconocimiento del grado de minusvalía a partir del 33 por ciento, y a partir del 65 por ciento, si no tiene ingresos, se le puede reconocer una pensión contributiva".