MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Duke en Durham (Estados Unidos) han descubierto lo que podría ser un nuevo marcador biológico para medir la salud cardiovascular analizando los restos del metabolismo en la sangre. El estudio de estos subproductos metabólicos vendría a unirse en este sentido al de los niveles de colesterol y los triglicéridos, las dos medidas cardiovasculares tradicionales. Las conclusiones del estudio se han hecho públicas durante las sesiones científicas anuales de la Asociación Americana del Corazón que se celebran estos días en Chicago.
Estos indicadores también podrían ser útiles para alertar de forma precoz ante la enfermedad coronaria y poner en marcha tratamientos preventivos que eviten que la enfermedad progrese a fases más peligrosas.
Los investigadores midieron las cantidades de metabolitos o subproductos del metabolismo celular en la sangre de personas en cuyas familias existían antecedentes de enfermedad coronaria a una edad precoz. Utilizando estas medidas, los investigadores crearon un "perfil de metabolitos" de cada individuo.
Los investigadores utilizaron estos perfiles para demostrar que muchos de los metabolitos tienen un fuerte carácter hereditario en comparación con los marcadores habituales del colesterol. Este descubrimiento sugiere que se podría identificar a las a una edad precoz a las personas más propensas a desarrollar la enfermedad coronaria.
Según Svati Shah, los resultados podrían tener implicaciones clínicas en lo referente a la posibilidad de identificar los genes que subyacen a la susceptibilidad ante la enfermedad coronaria.
Los datos sugieren la existencia de un fuerte componente genético en el perfil metabolómico de los individuos y que los cambios en los perfiles metabólicos de la descendencia de los pacientes de la enfermedad coronaria preceden al desarrollo de la enfermedad, señala Shah. Estos conocimientos podrían permitir comenzar con estrategias, como los fármacos o los cambios en el estilo de vida, que pudieran detener o ralentizar el proceso de la enfermedad.
Los investigadores estudiaron a 82 pacientes de cinco grandes familias con al menos dos hermanos afectados por la enfermedad coronaria a una edad precoz, aproximadamente los 51 años o antes en el caso de los hombres y los 56 o antes para las mujeres. Los investigadores tomaron muestras sanguíneas de todos los miembros de la familia y realizaron análisis detallados de 60 metabolitos.
Los científicos descubrieron que ciertos metabolitos eran significativamente diferentes en cinco familias y encontraron diferencias paralelas en las características clínicas de las familias. La presencia de metabolitos sospechosos podría servir como un indicador de que el organismo no utiliza adecuadamente ciertas fuentes de energía y podría representar un indicador biológico del riesgo cardiovascular, señalan los autores del trabajo.
Los científicos están planificando nuevos estudios para identificar los genes responsables de los perfiles metabolómicos descubiertos en el estudio y el desarrollo de estudios más amplios de pacientes sin antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular para analizar si existen algunas similitudes con el desarrollo precoz de la enfermedad.