MADRID, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
Entre los aspectos positivos que tiene la descentralización de la Sanidad y la transferencia de sus competencias a las comunidades autónomas, los epidemiólogos destacan que este proceso "aumenta el poder de decisión de los ciudadanos" y produce una "mayor proximidad institucional a la sociedad".
Así lo destacan los diferentes expertos que participan en la XLI Reunión Anual de la Sociedad Española de Epidemiología y XVIII Congresso da Associao Portuguesa de Epidemiología (APE), que se celebra en Oporto del 5 al 8 de septiembre.
Durante la mesa 'Acercar a las personas a la salud: ciencia ciudadana y epidemiología para informar las decisiones locales' los expertos abordarán cómo el conocimiento epidemiológico puede guiar acciones concretas y decisiones políticas, así como el papel de la sociedad en la toma de decisiones en salud.
En este sentido, el profesor Emérito de Planificación y Economía de la Salud de la Escuela Nacional de Sanidad (Instituto de Salud Carlos III), José Ramón Repullo, considera que "la descentralización de la sanidad en España aumenta el poder de decisión de los ciudadanos", poniendo como ejemplo la 'Marea Blanca' de 2012 y la movilización del Hospital de Verín (Ourense) de 2019.
"Existe la influencia local en la toma de decisiones. Además, las redes sociales facilitan que las agendas mediáticas locales y centrales se unifiquen", apunta José Ramón Repullo.
De acuerdo con Repullo, otra de las grandes ventajas de la descentralización es "la mayor proximidad institucional con la sociedad". "Es mucho mejor que depender de una administración lejana e impersonal, o de delegaciones locales que tienen escaso poder de decisión", apunta.
Además de en la toma de decisiones, el público general también juega un papel protagonista en la ciencia ciudadana, entendida como la ciencia o la investigación que se lleva a cabo a través de la participación de la ciudadanía. "Nadie mejor que las personas o las comunidades para conocer los problemas verdaderamente relevantes. No puede haber salud pública sin el público", declara el presidente del comité científico del congreso y del Instituto de Salud Pública de la Universidad de Oporto, Henrique Barros.
"Involucrar a los ciudadanos en todo el proceso de investigación epidemiológica es más que un desafío o un cambio de paradigma. Es sobre todo una gran oportunidad para acercar la ciencia a las necesidades sentidas por las poblaciones y comunidades", añade Barros.
