MADRID 24 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los colectivos Yo Sí Sanidad Universal y Marea Granate han presentado este viernes la campaña 'Nos echan de la salud' para denunciar la exclusión sanitaria que sufren algunos españoles que emigran a otros países ya que en ocasiones no se acepta el Certificado Sustitutorio Provisional (CSP) que, tras la reforma sanitaria de Ana Mato, se expide en determinados casos en lugar de la tarjeta sanitaria europea.
Según han denunciado ambos colectivos, el Gobierno "a golpe de decretazo" ligó el derecho a la asistencia sanitaria con la situación laboral, económica y administrativa de las personas, cambiando así el modelo sanitario de España.
Además del colectivo de inmigrantes en situación irregular, esta medida también afectó a aquellos ciudadanos que llevan fuera de España más de 90 días ya que, tras este periodo, "son dados de baja en el Sistema Nacional de Salud (SNS)", han asegurado ambas entidades.
"Provoca la desprotección social del desempleado o trabajador precario migrante que se ve forzado a emigrar en condiciones absolutamente vulnerables de cobertura sanitaria", han lamentado.
Actualmente, según explican, la tarjeta sanitaria europea sólo se expide a trabajadores con contrato indefinido, pensionistas o sus beneficiarios mientras que, en el caso de los parados de corta duración, se otorga un Certificado Sustitutorio Provisional (CSP) de 15 días de vigencia, ampliable a 90 días para el resto de casos.
Esta situación va en contra de la sugerencia de la UE, que dicta que los certificados sustitutorios sólo se deben expedir si no se dispone de la tarjeta sanitaria en ese momento, denuncia la campaña.
ESPAÑA "NO PAGA"
Además, en la mayoría de países europeos no se reconoce este certificado y se pide a la persona el pago por adelantado "porque España no paga". Por otro lado, las personas que emigran a países que no pertenecen a la UE y que no tienen convenios bilaterales con España ni siquiera cuentan con dicho Certificado Provisional, se ven "forzadas" a contratar un seguro privado si pueden permitírselo, critican.
Miriam, de Yo Sí Sanidad Universal, reconoce que la exclusión "obliga a vivir de una cierta manera" para intentar no caer enfermo "aun sabiendo que no es una cuestión de voluntad".
"El cambio de modelo sanitario, nos deja a solas con nuestras enfermedades", ha añadido Raquel, que dice haber vivido esta exclusión. "Incluso antes de ser atendida, con el malestar que me había llevado a urgencias, sin trabajo y con pocos ahorros, me vi con una deuda de 100 euros en la mano por cometer el error de ponerme enferma", ha explicado.
LA CAMPAÑA, EN TRES PASOS
La campaña se articula sobre tres propuestas de visibilización y denuncia de la exclusión sanitaria, y pretende recoger experiencias de exclusión en el Registro Estatal para la Denuncia de la Exclusión Sanitaria (REDES), grabar vídeos dirigidos al ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, y escribir cartas que relaten sus experiencias de exclusión sanitaria.
Con todo este material se pretende elaborar una guía práctica de información sobre el acceso a los sistemas sanitarios de los diferentes países a los que emigran las personas afectadas, para defender el derecho a la salud de todas las personas y facilitar el acceso a los servicios sanitarios cuando se requieran.
Además, desde la campaña se invita a toda la ciudadanía y a los profesionales del sistema sanitario "a que actúen, desde su lugar, buscando apoyos en nuestros colectivos o en otros, para evitar desde su actividad diaria, que la exclusión sanitaria sea un hecho".