MADRID 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) considera que el copago del transporte sanitario no urgente para determinados pacientes que podría aprobarse en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud de la próxima semana es un "verdadero despropósito" que tendrá un efecto "muy negativo" sobre las personas con mayores problemas de salud, con bajos ingresos y los residentes en zonas rurales.
Además, recuerda que esta nueva medida "se produce en un entorno en el que ya se han instaurado copagos sobre los medicamentos, se han excluido medicamentos de la financiación pública, se establecieron copagos sobre las ortesis y prótesis y sobre dietoterapia, y en el que hay una grave crisis económica que hace aumentar el paro, y no se produce la revalorización de las pensiones. Además --añade-- tenemos que sumar el euro por receta ya vigente en Cataluña y que amenaza por implantarse también en Madrid con la complicidad del Ministerio de Sanidad".
Por ello, asegura que el efecto de esta nueva medida tendría "un efecto muy negativo sobre las personas con mayores problemas de salud (sobre todo enfermedades crónicas) los que tienen bajos ingresos (pensionistas y/o desempleados) y a quienes viven en el ámbito rural que depende de este transporte para recibir atención especializada, la realización de pruebas diagnósticas y recibir algunos tratamientos".
Además, estima que el hecho de que se arbitren topes en los copagos que están en manos de las comunidades autónomas supondrá "otro nuevo caos como el de los medicamentos, y en algunas comunidades supondrán un préstamo a las mismas a coste cero que realizaran las personas con menores ingresos, en muchos caso a costa de su salud".
La federación recuerda que este tipo de medidas "no son una solución y generan graves problemas para la salud de las personas, como ha reconocido hasta la señora Merkel, que no es precisamente un ejemplo de solidaridad y sensibilidad social", apostillan.
Por ello, reitera su rechazo a los copagos establecidos en la sanidad porque "aumentan la desigualdad en el acceso a la salud y cada vez serán mas las personas que no podrán recibir la atención sanitaria", que calcula superan los 6 millones en todo el país.