VALENCIA 22 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Generalitat valenciana analizará los productos cárnicos que han sido inmovilizados en dos plantas empresariales de la Comunitat Valenciana por posible presencia de trazas de carne caballo no reflejadas en el etiquetado, aunque asegura que "no existe ningún riesgo para la salud de los consumidores".
"No es un problema de seguridad alimentaria, sino de defecto de etiquetado", han recalcado este jueves fuentes de la Administración en declaraciones a Europa Press.
De hecho, desde la Consejería de Sanitat no se ha actuado en este caso porque "no se trata de producto que conlleve un riesgo para la salud pública", sino de "un problema de fraude al consumidor, ya que en el etiquetado de la carne se indica que se trata de carne de vacuno y no indica sea de equino", han señalado desde este departamento.
Por parte de la Consejería de Economía, Industria, Turismo y Empleo, a quien compete lo relativo al etiquetado, han indicado a Europa Press que la Dirección Territorial de Consumo de Alicante ha inspeccionado dos plantas tras recibir una alerta por detección de ADN de caballo en productos alimenticios no declarado en el etiquetado.
REETIQUETAR LOS PRODUCTOS ANTES DE VENDERLOS
Según las mismas fuentes, han "ordenado a las empresas, que en todo momento han colaborado, la inmovilización de los productos de stock y que contacten con los establecimientos a los que distribuyen para retirar todas las unidades" de modo que éstas sean "correctamente reetiquetadas" por el distribuidor antes de volver a comercializarlas.
De hecho, al menos una de esas empresas ya había inmovilizado previamente esas partidas para analizar su composición, subrayan.
Una de estas mercantiles es la empresa Food 4, con sede en La Nucía (Alicante) y que suministró a su filial Greatco las hamburguesas inmovilizadas en Canarias por este mismo motivo, procedentes de una partida de Irlanda etiquetada como carne de vacuno.
FOOD 4 INMOVILIZÓ SUS HAMBURGUESAS EL LUNES
Su gerente, Jason Craig, ha explicado a Europa Press que este lunes recibieron un comunicado de un proveedor de Irlanda acerca de que una de las hamburguesas que comercializan "podría contener trazas de carne equina" e "inmediatamente" informaron a las autoridades y paralizaron esos productos en sus instalaciones para "proceder a realizar un muestreo" y determinar si efectivamente contienen carne de caballo.
"El resultado todavía no ha llegado", ha aseverado Craig, quien ha destacado que habrá tres análisis de esos productos, por parte del proveedor, de la empresa y de las distintas autoridades estatales y autonómicas, que han comenzado a tomar muestras este jueves.