VALENCIA 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las direcciones de las clínicas Mediterránea Médica de Valencia, la única en la Comunitat Valenciana que practica abortos de segundo trimestre, y Deiá Médica de Castellón, realizarán un cierre patronal del lunes 24 al próximo día 30 de septiembre ante los impagos del Consell, que asciende a 500.000 euros, y que han provocado que los trabajadores lleven casi cuatro meses sin cobrar. No obstante, harán servicios mínimos para que ninguna mujer sobrepase el límite legal.
El vocal de la Asociación de clínicas Acreditadas para la Interrupción del Embarazo (ACAI) y director de clínicas Mediterránea Médica de Valencia, Josep Lluis Carbonell, ha explicado en rueda de prensa que el Gobierno valenciano sólo ha abonado el 65 por ciento de 2010 y 2011 y lleva siete meses de este año sin pagar, lo que supone una deuda de 415.000 euros para Valencia y de otros 100.000 para el centro de Castellón.
Carbonell ha detelaldo que el 80 por ciento de las interrupciones que práctica son de mujeres remitidas por centros dependientes de la Conselleria de Sanidad, lo que supone unos 120 abortos mensuales, y el 20 por ciento son casos privados, principalmente de dos hospitales de gestión privada y de Murcia. Así, ha expuesto que si hasta ahora se han podido mantener han sido por estas casos privados, pero que desde hace dos meses los dos hospitales de gestión privada que les remitían pacientes también han dejado de pagar.
Esta situación ha provocado que no se pueda pagar a los proveedores, con la amenaza del corte de luz hace unos días, que los trabajadores del centro lleven cuatro meses sin cobrar e incluso que la Seguridad Social y Hacienda les haya embragado las cuentas "cuando han sido provocados por los impagos de la propia Administración".
Por ello, ha explicado que se han visto obligados a convocar este cierre patronal. No obstante, mantendrán servicios mínimos para atender a las usuarias que se encuentren en el límite de la interrupción por voluntad propia (14 semanas); y a aquellas mujeres que afectadas por patología fetal puedan llegar a superar las 22 semanas de gestación (límite legal), así como casos especiales.
Las mujeres que estén en el primer trimestre pueden derivarse a otros centros hospitalarios. El mayor problema es para las mujeres que están en el segundo trimestre ya que Mediterránea Médica es la única clínica que practica abortos en estos casos, y los hospitales "se niegan a practicarlos", por lo que se "alargará la agonía de las mujeres dos semanas". No obstante, ha recalcado que no quiere que la Conselleria deje de remitir pacientes porque supondría "la ruina total" de las clínicas.
Por ello, entregarán este viernes una carta al Registro de la Conselleria de Sanidad para solicitar una entrevista. Carbonell ha señalado que comprenden que el Consell está esperando la llegada del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), por lo que están dispuestos a suspender el cierre patronal con "una carta de compromiso" de pago con una cifra, que aunque no sea el total, permita pagar a proveedores, nóminas y hacer frente al embargo de la seguridad Social.
Carbonell ha señalado que no cree que estos impagos obedezcan a motivos políticos para abocarlos al cierre, pero ha advertido de que si el conseller de Sanidad, Luis Rosado, ni siquiera les contesta "sí que pensará que se trata de una campaña orquestada".
CONTRA LA REFORMA DE GALLARDON
Por otra parte, ha informado de que con este cierre también quiere protestar contra la reforma de la Ley del Aborto anunciada por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, que "condena a las mujeres a parir un feto malformado". "Es una crueldad sublime para las mujeres", ha constatado y "más cuando se han suprimido los fondos para el ciudadano de la dependencia".
Además, ha señalado que con la presente ley se ha conseguido disminuir y que casi desaparezcan los abortos del segundo trimestre que "antes eran tan numerosos, al poder abortar de forma gratuita en la red pública". Por ello, ha advertido de que si Gallardón persiste en esta reforma y quiere volver a llevar la práctica de abortos a la clandestinidad, pondrá en marcha "una red de clínicas gratuitas clandestina para garantizar este derecho de las mujeres". "Nos tendrán que meter a la cárcel a muchos", ha señalado.