VALENCIA 30 Abr. (EUROPA PRESS) -
EL sindicato médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV) se plantea una huelga en la sanidad publica "en defensa de los derechos de tanto de los médicos, trabajadores y ciudadanos a una sanidad general para todos". Asimismo, pedirá a los demás sindicatos de la sanidad una medida parecida.
CESM-CV, según ha indicado en un comunicado. espera un "desmentido" de la Conselleria de Sanidad sobre las acciones del Consell y de su vicepresidente, José Císcar para tomar "otras decisiones distintas".
El sindicato médico se ha sumado a las manifestaciones en defensa del estado del bienestar y de los servicios públicos que se celebrará este domingo y ha hecho un llamamiento a todos los médicos para que también se sumen.
"Tras las últimas agresiones al Sistema Nacional de Salud (SNS), los derechos de los ciudadanos y de los profesionales sanitarios", CESM-CV considera "imprescindible que todos los sindicatos sanitarios estemos unidos para evitar el desmantelamiento de la sanidad publica". "EL decreto nacional y las decisiones del Consell en el día de ayer hacen imprescindible una respuesta drástica, ha subrayado.
Asimismo, como integrante de Cemsatse, se ha sumado a la manifestación convocada para el 10 de mayo en todos los centros sanitarios en contra de las medidas de recorte.
"REGRESO A HACE DÉCADAS"
Como miembro de la Federación de Sindicatos de Educación y Sanidad (FSES), CESM-CV ha denunciado "el regreso a situaciones hace ya décadas, superadas en cuanto a la garantía de los derechos básicos de los ciudadanos". Asimismo, ha criticado "el desprecio más absoluto que se está mostrando desde los poderes públicos con los derechos laborales de los médicos y los empleados públicos en general".
"Se modifican sistemas retributivos y horarios, se suprimen categorías profesionales de un día para otro, todo ello sin negociación colectiva ni diálogo alguno con los agentes sociales", ha censurado.
En esta línea, el sindicado entiende que "no resulta permisible que nuestro país vuelva al modelo social vigente en el primer tercio del pasado siglo por la incapacidad o la mala fe de nuestros gobernantes".
Para esta entidad, "destruyendo nuestro Sistema Nacional de Salud no van a solucionarse los problemas de su financiación". Además, ha añadido: "no es imponiendo a los médicos una conducta impropia tanto en la prescripción de medicamentos como en el rechazo a la atención sanitaria de determinados colectivos como va a conseguirse su implicación con ningún tipo de reforma".
"No es responsabilidad de los profesionales sanitarios definir la política de inmigración ni, mucho menos, incurrir en omisión de socorro ante una persona que requiera de asistencia. No podemos ser los rehenes ni los cómplices de las erráticas políticas seguidas en este terreno", ha subrayado.
CESM-CV ha expresado su defensa al "derecho de todos los españoles, por el mero hecho de serlo, a recibir una atención sanitaria de calidad financiada mediante los presupuestos generales del Estado y sin copagos discriminatorios".
En este sentido, considera que contribuir a la prestación farmacéutica en función de la renta "genera un deterioro de la sanidad como derecho de ciudadanía, dado que el sistema se financia mediante impuestos progresivos en los que los que ya aportan más los que más tienen".
Así, entiende que en el momento de la asistencia, "debe primar la igualdad económica en el acceso a los servicios porque ello es una garantía de cohesión social: no hay ricos ni pobres en el acceso a la sanidad sino ciudadanos libres e iguales".
CESM-CV ha insistido en que el Consell "está cometiendo un grave e irreversible error al negarse a negociar una solución al decreto de recortes que ha impuesto a todos los empleados públicos y, ahora, además --ha añadido-- privatiza la Sanidad sin contar con la mesa sectorial e ignorando a los trabajadores".