El Hospital Sant Pau planea cerrar con "déficit cero" el 2013 para descartar despidos

Gerente del Hospital Sant Pau, Xavier Corbella
ICS
Actualizado: lunes, 8 octubre 2012 12:13

Ve necesario reducir los costes de plantilla un 10 por ciento


BARCELONA, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Hospital Sant Pau de Barcelona se ha propuesto cerrar con "déficit cero" las cuentas del centro del año que viene como requisito indispensable para descartar otro expediente de regulación de empleo (ERE) en el futuro, aunque el hospital seguirá lastrando en 2014 un déficit de 40 millones de euros de años anteriores.

En una entrevista concedida a Europa Press este domingo, el gerente del hospital, Xavier Corbella, ha anunciado que a nivel económico el centro "tiene dos retos económicos" que pasan por dejar de tener pérdidas en diciembre de 2013, y a partir de 2014 trabajar para enjugar la deuda acumulada prevista de 40 millones en una segunda fase.

"En pocos meses debemos redirigir las cuentas, pero no podemos conseguirlo de golpe", ha observado Corbella, quien ha explicado que para este año la prioridad es rebajar a 10 el déficit estimado de 19 millones en las cuentas de 2012, gracias de la aplicación de los ajustes de la función pública implantados desde julio en el centro y otras medidas de eficiencia.

Este año el hospital tiende a generar 19 millones de déficit por la imposibilidad de aplicar las medidas previstas por el ERE fallido de 2011, que sólo estuvo vigente tres meses --entre final de noviembre de 2011 y primeros de febrero de este año--.

Actualmente, las cuentas del hospital acumulan 30 millones de deuda de años anteriores --20 correspondientes a 2011--, a los que habrá que añadir los 10 previstos para este año, lo que suma la deuda acumulada de 40 millones para enero de 2014, ha desglosado Corbella, que llegó al hospital en mayo, dos meses después de la intervención de la Generalitat.

Corbella ha señalado que el hospital todavía no descarta un expediente, que ha considerado "no deseable", pero que ha supeditado a la consecución del déficit 0 el año que viene y a un estudio de rendimientos y productividad de recursos humanos que ha empezado el centro.

"De una foto inicial en junio, en que la única opción inicial era un ERE, con las medidas de la ley, ahora bajando la tasa de reposición y funcionando con la nueva dinámica de reducir costes y consumos la foto se nos está haciendo más pequeña", ha señalado el directivo, quien también ha reivindicado el nivel de excelencia del centro pese a todo.

Preguntado por un supuesto sobredimensionamiento de la plantilla, como han apuntado gerentes anteriores, Corbella no ha querido responder, pero ha señalado: "De primeras, el coste de la plantilla nosotros lo deberíamos reducir un 10% seguro, si se hace a base de los salarios o de las personas esto deberíamos verlo en qué proporción".

Corbella ha admitido los "grandes sacrificios y renuncias" que suponen para los cerca de 3.000 trabajadores del Sant Pau las medidas de austeridad de la función pública, que implican la supresión de la paga extra de Navidad, de la paga variable por objetivos y dejar de reponer nueve de cada diez bajas del hospital, así como dejar de subvencionar el comedor de los trabajadores y guarderías para los hijos de los empleados, acompañadas de un una reducción del 15% de los mandos.

MEDIDAS DE EFICIENCIA

Igualmente el hospital trabaja en otras medidas de eficiencia relacionadas con la gestión empresarial que también permitirán alcanzar el objetivo de contención, a través de una "mejora de las compras, consumos, precios de contratación externos, reducir las contrataciones de servicios externos, informatización y abandonar el alquiler de almacenes de fuera", ha enumerado el directivo.

De esta forma, las medidas de la función pública representarán el 60% del ahorro, mientras que las medidas de eficiencia supondrán el otro 40%, ha estimado Corbella, quien ha apuntado un ahorro de 450.000 euros con el traslado del bloque de Psiquiatría de los pabellones del antiguo hospital al nuevo, por los costes derivados del movimiento de enfermos con ambulancias para la realización de pruebas en las instalaciones nuevas, los costes de seguridad y de reparación del edificio antiguo.

El director también ha manifestado su intención de captar más actividad pública del Servicio Catalán de la Salud (CatSalud) que actualmente compra a centros privados cuando se acumulan listas de espera de intervenciones quirúrgicas u otros servicios prioritarios en otros hospitales públicos.

Corbella ha descartado que la Fundación de Patrimonio del hospital se vaya a hacer cargo del déficit derivados de la gestión del centro que ha argumentado que tiene la misión de aportar un "valor añadido" al hospital con programas de voluntariado y becas internacionales a médicos, entre otros.