MADRID 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) ha afirmado que no descarta "diferentes medidas de presión", junto al resto de organizaciones representativas de la Sanidad y la Educación, "para defender el sistema de bienestar, ante las reformas y los recortes planteados por el Gobierno y las diferentes comunidades autónomas".
De este modo, señala que las actuaciones se concretarán los próximos días, partiendo de la base de una "firme defensa de los principios que sustentan el sistema de bienestar, la calidad asistencial sanitaria y educativa, el sistema público de protección y las condiciones laborales de los trabajadores", según informa en un comunicado.
El sindicato considera que los nuevos recortes anunciados por el Gobierno supondrán "un descenso en la calidad educativa y un endurecimiento de las condiciones laborales del profesorado" y ha rechazado la adopción de medidas unilaterales porque considera que, "aunque supongan un alivio a corto plazo, "generarán más dificultades a medio y largo plazo, hiriendo de gravedad la calidad del sistema educativo".
En este sentido, CSIF advierte de que los recortes anunciados, como subir ratios, acabar con los programas de atención a la diversidad y endurecer las condiciones laborales "pueden suponer un efecto nefasto para los intereses de la sociedad española, que verán cómo los niveles educativos retroceden a los niveles de hace treinta años".
Por otro lado, respecto a las medidas adoptadas este miércoles por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, CSI-F cuestiona el nuevo sistema de copago y rechaza "de manera rotunda que el Gobierno y las comunidades autónomas hagan recaer una vez más sobre los ciudadanos y previsiblemente, sobre los profesionales sanitarios la mayor parte del peso del ajuste económico". No obstante, valora "de manera positiva" la prohibición del turismo sanitario o la central de compras, por su incidencia en el control del gasto.