La crisis también afecta a la salud mental de los que tienen una buena situación económica

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EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 11 octubre 2011 15:33


MADRID, 11 Oct. (EUROPA PRESS) -

La actual crisis financiera ha propiciado que los casos de trastornos depresivos o ansiedad se hayan disparado en España, principalmente por los problemas económicos que viven muchas personas en paro o con dificultades para acceder al mercado laboral, aunque también está afectando a quienes tienen una buena situación laboral.

Así lo asegura el secretario de la Asociación Española de Psiquiatría Privada (ASEPP), Antonio Arumí, con motivo del Día Mundial de la Salud Mental que se celebra este martes.

"La situación de crisis no sólo afecta a los que la están sufriendo de forma directa, sino que también tiene gran incidencia en los ansiosos de tipo obsesivo, con preocupación continua, a pesar de tener una buena situación", como reconoce este experto.

En estos casos, explica Arumí, la angustia de lo que sucede a su alrededor y la incertidumbre del futuro produce a estas personas "un estado de ansiedad que debe ser tratado".

Además, desde ASEPP avanzan que si la crisis se mantiene en el tiempo, la frustración y los problemas económicos, familiares y sociales que ésta genera provocarán la aparición de nuevos enfermos".

De hecho, las dolencias mentales ya no son un terreno acotado a mujeres en edad madura, ancianos o adolescentes. "El panorama ha cambiado y ahora afectan a todas las franjas de edad, a ambos sexos y a todos los niveles sociales", reseña Arumí, avanzando que "los hombres maduros, los niños o los jóvenes que no pueden acceder al mercado laboral se han unido a la población de riesgo".

ALGUNAS MEDIDAS PREVENTIVAS

Para evitar esta situación, proponen corregir algunos de los hábitos de la vida diaria, como conseguir un equilibrio entre vida personal y laboral, tener una alimentación equilibrada y sana, practicar actividad deportiva con regularidad, tener actividades motivadoras en nuestro tiempo libre, contar con una vida familiar estable y armónica y una vida social rica y estimulante y no consumir sustancias tóxicas.

En este sentido, el vicepresidente de ASEPP, José Antonio López Rodríguez, recuerda que "existe una estrecha conexión entre la salud mental y la salud física, por lo que, en muchos casos, tratando la primera se puede resolver la segunda".

En el caso concreto de las enfermedades de miocardio, la relación entre situaciones de estrés y depresión con estas patologías es clara, ya que las personas con cualquiera de estos dos trastornos psíquicos tienen una mayor tendencia a sufrir un infarto. Además, también ocurre al contrario, es decir, aquellos con problemas de corazón cuentan con un mayor riesgo de depresión.

"Las situaciones de estrés continuado se han convertido en una de las mayores preocupaciones con las que nos encontramos en Psiquiatría, puesto que no sólo afectan al cerebro, sino también a zonas inflamatorias de cualquier órgano del cuerpo", asegura López Rodríguez.