CIUDAD DE MÉXICO, 22 Jul. (Del enviado especial de EUROPA PRESS, David Guirao) -
El presidente de la Sociedad Internacional de Sida (IAS, por sus siglas en inglés), Anton Pozniak, ha alertado de que las crisis humanitarias que se están viviendo en todo el mundo, como en Siria o en Venezuela, pueden "amenazar" el progreso a nivel mundial que se ha realizado en la lucha contra la epidemia del sida.
"Las personas en situaciones de emergencia son especialmente vulnerables a nuevas infecciones. Necesitamos trabajar para garantizar que la prevención y tratamiento contra el VIH formen parte de los esfuerzos integrales globales de ayuda", ha reclamado Pozniak en la rueda de prensa inaugural de la reunión anual de la IAS, que se está celebrando desde este domingo en Ciudad de México para presentar los avances científicos más recientes sobre tratamiento, cura y prevención del VIH.
En la conferencia, seis expertos de todo el mundo han reclamado "acciones urgentes" para afrontar las necesidades de las más de 135 millones de personas afectadas por las crisis humanitarias y que necesitan asistencia derivada de conflictos armados o desastres naturales. En primer lugar, la directora científica local del congreso, Brenda Crabtree Ramírez, se ha referido a la migración masiva de personas en América Central y Venezuela debido a la inestabilidad política.
"El VIH es un desafío en América Latina, que además es una de las regiones más inequitativas del mundo. Los esfuerzos para controlar la epidemia de VIH solo serán exitosos cuando las enormes diferencias en la distribución de los ingreso se acorten. Hemos tenido éxitos en la lucha contra el sida en Latinoamérica, pero los cambios políticos y sociales los están desafiando. Esta inestabilidad ha afectado a cientos de miles de personas que han tenido que migrar, y los que se han quedado en sus países tienen servicios de salud deficientes. En general, la implementación de la PrEP (pastilla preventiva del sida) es baja. En Chile o Costa Rica, por ejemplo, la incidencia va en aumento", ha añadido.
Sin embargo, el gerente del programa de salud Sexual SingleStep, Momchil Baev, ha puntualizado que esta situación no solo se da en América Latina, sino que también se está produciendo en Europa del Este. "Tenemos la ciencia y la tecnología para enfrentar la epidemia y ahora es tiempo de eliminar el estigma y la discriminación para alcanzar a toda la población. Europa del Este y Asia Central son las únicas regiones del mundo en donde la tasa de nuevas infecciones por VIH está creciendo. De hecho, Rusia contribuye con 100.000 infecciones cada año", ha señalado, pidiendo "más protocolos" entre Gobiernos y organizaciones como la suya para acabar con la epidemia de VIH en Europa del Este.
EL VIH EN NIÑAS
Por otra parte, la profesora de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) y directora del Programa de Investigación de Sida en Sudáfrica (CAPRISA, por sus siglas en inglés), Quarraisha Abdool Karim, ha advertido de las "barreras estructurales y sociales como el estigma y la discriminación" que sufren las mujeres y niñas para acceder a los servicios sanitarios. Estas inequidades, tal y como ha recordado, se acentúan durante las crisis humanitarias.
De hecho, ONUSIDA estima que tres de cada cinco nuevas infecciones por VIH en África subsahariana se dan en niñas adolescentes de entre 15 a 19 años, con unas 1.000 infecciones por día. "Las crisis y emergencias ponen a las mujeres y a las niñas en un elevado riesgo de sufrir violencia sexual, contraer el virus del VIH o tener un embarazo no deseado. Para que cualquier programa contra el VIH sea exitoso debe ser integral e incluir planificación familiar y prevención de embarazo", ha comentado Abdool Karim.
También en niños, la doctora Fatima Mir, profesora asistente en Pediatría de la Universidad Aga Khan de Karachi (Pakistán), ha detallado el reciente brote de VIH en Pakistán, con cerca de 500 niños infectados por el virus en una sola ciudad. "Estamos experimentando un brote devastador de VIH en niños pequeños que se infectan por la reutilización de jeringuillas y por transfusiones de sangre. La solución es clara y sencilla: necesitamos invertir en entrenamiento básico dentro de los centros rurales de salud y garantizar el acceso a los servicios de salud de primero y segundo nivel a mujeres y niños", ha reclamado.