HUELVA 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consumo de ansiolíticos y antidepresivos ha aumentado en un 10 por ciento en los dos últimos años, de manera que el número de envases de estos fármacos en 2008 alcanzó los 324.547 y se elevó hasta los 357.248 en este año. Se trata de los datos registrados en el Distrito Sanitario Huelva-Costa, que aglutina a los centros de salud con más afluencia de la provincia, tales como la provincia y la zona costera.
Según los datos facilitados por la Delegación de Salud a Europa Press, la preinscripción de estos fármacos ha ido en aumento a lo largo de los últimos años.
Así, precisan que cada año sube la prescripción de todos los medicamentos, no sólo los ansiolíticos y antidepresivos, lo que pone de manifiesto que "cada vez nos medicamos más".
De este modo, en 2007 los envases prescritos por los médicos de familia era de 300.226 --205.891 de ansiolíticos y 94.335 de antidepresivos--. Esta cifra asciende en 2008 hasta los 324.547 envases --222.004 de ansiolíticos y 102.543 de antidepresivos--, lo que supone un aumento del ocho por ciento de un año a otro.
Esta misma tendencia se dio también el pasado año. En 2009 se prescribieron 339.516 envases, 239.075 de ansiolíticos y 108.649 de antidepresivos, lo que se traduce en un incremento del cuatro por ciento.
Este año la cifra total de envases de estos dos fármacos fue de 357.248, siendo 239.075 en el caso de los ansiolíticos y 118.173 para los antidepresivos. Respecto a la diferencia entre este año y el anterior, el incremento es de un 5,22 por ciento.
Así, los envases prescritos en 2007 y 2010 suponen un aumento del 18,99 por ciento, mientras que el incremento entre este año y 2008 es del diez por ciento.
VALORACIÓN DEL EXPERTO
Por su parte, el director del centro de salud de El Torrejón, Jesús Pardo, ha remarcado que el aumento del consumo de fármacos en general responde a que la ciudadanía "cada vez soporta menos el dolor", ya que acude a la medicación para asuntos que en ocasiones requieren un tiempo o evolución, como el fallecimiento de un familiar o un divorcio, entre otras.
Pardo ha explicado que la sociedad en que vivimos, "tiende a recurrir a la medicación".
Preguntado por si esta aumento en el consumo de ansiolíticos y antidepresivos está relacionado con la actual situación económica, Pardo ha asegurado que debido a la crisis "ha aumentado el número de pacientes en las consultas" por problemas de ansiedad, estrés o depresión, ya que "la resolución de los problemas es muy complicada", porque se enfrentan al desempleo o a ajustes económicos.
Ha insistido en que desde los facultativos apuestan por recetar estos fármacos sólo cuando es "estrictamente necesario", ya que antes intentan con el paciente mitigar su situación mediante sesiones de psicoterapia breve o con técnicas para afrontar el estrés. No obstante, ha matizado que estos métodos, los médicos los realizan en las consultas programadas y "al mes se pueden abordar dos o tres casos" ante la falta de tiempo.
"La crisis afecta gravemente la salud", ha asegurado este médico, que pese a que su centro de trabajo está en una barriada de El Torrejón, se ha mostrado convencido de que esta situación es extrapolable a otras zonas de la provincia.
Pardo ha señalado que los problemas psicológicos se derivan en otras patologías fisiológicas, como la alopecia, cefaleas, dolor abdominal, entre otras. Frente al aumento de la medicación, Pardo destacado que la solicitud de bajas ha disminuido como consecuencia de la crisis, así como el tiempo que los pacientes están de baja, "por el miedo a perder el empleo, los usuarios quieren estar sin trabajar el menor tiempo posible".
Por último, Pardo ha adelantado que ante la actual coyuntura, todo apunta a que "seguirán aumentando las consultas y el consumo de fármacos, y también de ansiolíticos y antidepresivos".