MADRID 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los traumatólogos del Hospital Ramón y Cajal, un colectivo formado por una cuarentena de facultativos, continuarán con la huelga convocada para este jueves, pese a la dimisión del jefe del servicio, Rafael Llopis, de manera que se celebrará el segundo día de paros, que en principio no cesarán hasta que haya una convocatoria pública para el puesto.
Después de una jornada de huelga en el servicio de Traumatología y Cirugía Ortopédica del centro y de una convocatoria de huelga de todo el hospital para los primeros días de febrero, que han llevado a que el jefe de servicio presentara su dimisión esta mañana, los traumatólogos del centro han decidido seguir con sus paros, previstos para mañana y los días 26 y 28 de enero.
Los médicos estaban citados a las 14 horas del miércoles con el director de gestión del centro para conocer de primera mano la dimisión del jefe de servicio, como así fue. En la reunión, el director de gestión les comunicó la "rescisión de la comisión de servicio del doctor Llopis" por haber presentado su dimisión, y que volvería a su antiguo puesto en el Hospital Santa Cristina.
La reunión no duró más, ya que en ese momento los médicos quisieron "negociar" sobre otras cuestiones, pero el director gerente les dijo que él sólo había acudido a ellos para informar y que no tenía potestad para nada más. El Comité de huelga señaló que ellos hubiesen querido negociar otros aspectos.
Los médicos quieren que la Dirección General de Recursos Humanos revoque el nombramiento de Llopis, que se restituya al antiguo jefe de servicio, y que se haga una convocatoria "pública, en igualdad de mérito y capacidad" de la plaza vacante.
Este jueves, se celebrará una concentración en el hall del hospital, y el día 26 se celebrará la próxima asamblea del centro. Asimismo, sigue en pie la huelga de todo el centro que está convocada para uno de los primeros días de febrero.
Ante la huelga, la Consejería de Sanidad ha fijado unos servicios mínimos que "garantizan que los pacientes, cuya atención no pueda sufrir demora alguna, puedan recibir la debida atención sanitaria, evitando todos aquellos riesgos que puedan conllevar el deterioro de su salud", informaron desde la Consejería.