Sanidad espera que la tendencia empiecen a bajar en una o dos semanas y que la comunidad no llegue a pasar a alerta 4
SANTANDER, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
Sanidad ha observado en los últimos días una ralentización de los contagios de coronavirus en Cantabria, aunque advierte que la incidencia todavía sigue creciendo y aún no se ha alcanzado el pico de la sexta ola.
"Se ha ralentizado el crecimiento, no crecemos tan rápido pero seguimos creciendo", porque la incidencia 14 días está en casi 4.000 casos por 100.000 habitantes y a siete días supera los 2.200, ha explicado este viernes el consejero del área, Miguel Rodríguez, en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press.
Rodríguez no ha concretado cuándo se llegará a alcanzar el pico de contagios de esa sexta ola, pero cree que "si no es la semana que viene será la siguiente", y espera que a partir de ahí "se produzca un descenso rápido".
Por ello cree que Cantabria, que está actualmente en nivel de alerta 3 (riesgo alto) frente al Covid, no llegue a pasar al nivel 4 (riesgo muy alto), teniendo en cuenta que el parámetro que la mantiene sin subir es la ocupación hospitalaria.
Y es que, aunque los hospitales tienen a día de hoy 222 pacientes Covid, con una ocupación del 14% y una tasa de ingresos del 36,9%, ambas en nivel alto, el consejero ha explicado que se viene observando que ahora los ingresos "están yendo más rápido", sobre todo en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), donde hay 26 personas por la infección.
Esto se debe a que los contagios son "menos graves" y permiten dar el alta antes a los pacientes, ha explicado. No obstante, Cantabria está registrando en los últimos días más de 2.000 contagios diarios y se calcula que el 4% de los infectados terminan en los hospitales.
VACUNACIÓN
Por otro lado, Rodríguez ha avanzado que la vacunación con la dosis de recuerdo a toda la población a partir de los 18 años y la cuarta para personas inmunodeprimidas, avaladas ayer por la Comisión de Salud Pública, se podrían acometer exclusivamente en los centros de vacunación, ya fuera de los centros de salud para que su personal pueda dedicarse a atender a los usuarios.
Por el mismo motivo, también se reforzarán los centros de pruebas de detección del coronavirus, y se ha ampliado la plantilla de personal administrativo para atender por teléfono y realizar tareas burocráticas.