MADRID 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consumo de frutas y verduras se asocia con un riesgo menor de cáncer de mama con receptor de estrógeno negativo (ER-), uno tipo de tumor que tiene menos tasas de supervivencia y es meno dependiente de los niveles de estrógenos que los ER+, según un estudio publicado este jueves en 'Journal of the National Cancer Institute'.
Seungyoun Jung, anteriormente del Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard y en la actualidad en la División Channing de la Red de Medicina del Hospital Brigham y de la Mujer, ambas instituciones en Estados Unidos, y sus colegas analizaron los datos de 20 estudios de cohortes de mujeres que fueron seguidos durante un máximo de 11 a 20 años.
Los científicos investigaron la asociación de un alto en comparación con un bajo consumo de frutas y verduras y el riesgo de desarrollar cáncer de mama en cada estudio y luego se combinaron las estimaciones específicas del estudio para generar las estimaciones de resumen de todos los informes combinados.
Los auotres encontraron que el total de frutas y verduras fue significativamente relacionado con un menor riesgo de cáncer de mama ER-, pero no con el riesgo de cáncer de mama en general o riesgo de tumores de mama ER +. Los resultados mostraron que el riesgo más bajo se asocia principalmente con el consumo superior de vegetales.
"Estos resultados apoyan el valor de examinar los factores etiológicos en relación con el cáncer de mama caracterizado por el estado de receptores hormonales en los grandes análisis agrupados porque las asociaciones modestas con subtipos menos comunes de cáncer de mama se pueden haber pasado por alto en los estudios más pequeños", escriben los autores.
En un editorial acompañante, Cynthia A. Thomson y Patricia A. Thompson, ambas del Centro de Cáncer de la Universidad de Arizona (Estados Unidos) escriben que los resultados del estudio apoyan el énfasis en una mayor ingesta de verduras (y también de una fruta) para disminuir el riesgo de cáncer de mama ER-. Sin embargo, también dicen que "la interpretación de estos resultados puede ser impugnada por los efectos conocidos de otros posibles factores de confusión, incluyendo los comportamientos de salud".