MADRID 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
A diferencia de otras investigaciones, un estudio reciente publicado en la revista 'Neurology' ha detectado que el nivel total de antioxidantes en la dieta de las personas, como el licopeno, beta-caroteno y vitaminas C y E que se encuentran en muchos alimentos, no está relacionado con el riesgo de desarrollar un accidente cerebrovascular o demencia.
"Estos resultados son interesantes porque otros han sugerido que los antioxidantes pueden ayudar a proteger contra el ictus y la demencia", dijo la autora del estudio, Elizabeth E. Devore, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard en Boston (Estados Unidos) y del Centro Médico Erasmus en Rotterdam (Países Bajos).
"Es posible que los antioxidantes individuales o los principales alimentos que aportan los antioxidantes, más que el nivel total de antioxidantes en la dieta, contribuyan a un menor riesgo de demencia e ictus encontrado en estudios anteriores", concreta esta experta.
En el estudio participaron 5.395 personas mayores de 55 años o más que no tenían signos de demencia al inicio de la investigación, quienes completaron cuestionarios sobre la frecuencia con la que comían 170 alimentos en el último año. Los investigadores analizaron a los participantes durante una media de casi 14 años.
Los participantes se dividieron en tres grupos: niveles bajos, moderados y altos de antioxidantes en la dieta. Alrededor de 600 personas desarrollaron demencia durante el estudio y cerca de 600 personas tuvieron un accidente cerebrovascular, pero los autores encontraron que las personas con altos niveles de antioxidantes no fueron más o menos propensos a desarrollar la enfermedad cerebral que aquellas con bajos niveles de antioxidantes.
Devore observó que aproximadamente el 90 por ciento de la diferencia en los niveles de antioxidantes en el estudio fue debido a la cantidad de café y el té que se bebía, que contienen altos niveles de antioxidantes no tradicionales tales como los flavonoides.
"Esto difiere de un estudio italiano que encontró que los niveles más altos de antioxidantes totales se asociaron con un menor riesgo de accidente cerebrovascular, donde la variación de café y té era menor y la contribución de las bebidas alcohólicas, frutas y verduras fue mayor", concluye Devore.