MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Hospital Infantil de Boston (Estados Unidos) han conseguido aislar en ratones células madre embrionarias producidas a través de un proceso llamado "partogénesis", en el que un embrión comienza a desarrollarse a partir de un óvulo no fertilizado. Las conclusiones de la investigación, cuya posible aplicación en humanos aún está pendiente de estudio, se publican en la edición digital de la revista 'Science'.
Debido a que las células madre portan dos copias del genoma materno en vez de una del materno y otra del paterno, los científicos debieron realizar un emparejamiento más específico con el animal donante del óvulo.
En particular, las proteínas de la superficie de la célula llamadas antígenos MHC, que son prácticamente únicas en cada individuo, debían ser estrechamente compatibles. Las proteínas MHC se convierten en dianas para las células T del sistema inmune cuando una sustancia extraña entra en el organismo, así las incompatibilidades son una razón importante por la que los órganos y tejidos trasplantados sean rechazados.
Utilizando ovocitos de ratón de dos fases separadas de mitosis, los científicos indujeron el desarrollo patogénico y derivaron las células madre a partir de los embriones resultantes, que portaban el rango completo de las proteínas MCH del donante.
Las células madres no fueron capaces de generar todos los tipos de tejido, algo que podría deberse a la ausencia de las características del genoma paterno. Los científicos desconocen aún si este método, en el que se necesitan un gran número de ovocitos, podría funcionar en humanos.