MERIDA 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad y Consumo, en colaboración estrecha con el Ministerio de Sanidad y Consumo, participa a través de varios centros sanitarios de la Comunidad Autónoma en dos estudios de ámbito nacional para conocer más aspectos de la seguridad de los pacientes atendidos en los centros sanitarios de todo el país.
Según indicó en una nota recogida a Europa Press el director general de Formación, Inspección y Calidad Sanitarias, José María Vergeles, el trabajo en la seguridad de pacientes y profesionales es una de las líneas que deben ser "prioritarias" en todos y cada uno de los planes de calidad de los servicios sanitarios.
En este sentido, añadió que desde este convencimiento es de donde surge la "estrecha colaboración" que Extremadura ha establecido con el Ministerio de Sanidad y Consumo.
A juicio de Vergeles, seguridad y confort de los centros y servicios sanitarios son los dos elementos clave en una mejora continua de la calidad, tanto la calidad científico-técnica de la atención que reciben los ciudadanos, así como la calidad de relación de los ciudadanos con el sistema sanitario.
Uno de los estudios se centra en valorar la utilización ajustada a las mejores pruebas científicas de los medicamentos utilizados en los centros hospitalarios. Esta tendencia supone un trabajo de minimizar en lo posible la presencia de efectos adversos en relación con los medicamentos.
Este estudio se enmarca dentro de las Buenas Prácticas, así se analizarán las indicaciones de los medicamentos que se han utilizado y cómo se ajustan estas prescripciones a la mejor evidencia científica.
En este estudio participarán los hospitales Perpetuo Socorro e Infanta Cristina del Complejo Hospitalario Universitario de Badajoz, y del Hospital de Don Benito-Villanueva de la Serena. Para ello, los servicios de Farmacia Hospitalaria son claves en este estudio.
Según Vergeles, hay que trabajar de forma "decidida" en disminuir la variabilidad en la práctica clínica, ya que en la actualidad existe un importante volumen de literatura científica que sirve de guía para los profesionales y para que la calidad científico-técnica de la atención sea cada vez mejor.
En este sentido, la Consejería de Sanidad y Consumo ha desarrollado todo el proyecto de la Biblioteca Virtual del Sistema Sanitario Público y colabora en el proyecto GuiaSalud en el ámbito nacional, herramientas que están a disposición de los profesionales, destacó el director general.
ESTUDIO ENEAS
El otro estudio es una continuación y ampliación del estudio ENEAS en el que ya participó el Hospital Don Benito-Villanueva de la Serena. En esta continuación sigue colaborando dicho centro pero, además, este estudio se va a abrir a la Atención Primaria de Salud. Así se incorporarán los centros de salud de Pueblonuevo del Guadiana y Plaza de Argel, de las áreas de Salud de Badajoz y Cáceres respectivamente.
Vergeles declaró que el objetivo del estudio ENEAS, tanto en su fase I como en la II, es la comunicación de los profesionales de los centros sanitarios de los efectos adversos que se identifiquen en los pacientes que están siendo atendidos. Añadió que esta comunicación permite identificar las áreas que necesitan de un abordaje mayor para aumentar la seguridad del paciente y ayudan a crear un sistema de información sobre efectos adversos y las áreas de trabajo en las que hay que incidir.
El director general subrayó que en ningún momento los ciudadanos deben interpretar que se encuentran en un sistema sanitario "inseguro". "Eso no es cierto; en la actualidad estamos en una de las épocas más segura de toda la historia de los sistemas sanitarios·, indicó Vergeles, quien añadió que no obstante, la incorporación de tecnología, medicamentos potentes y otras herramientas al sistema sanitario no están exentas de riesgos y de efectos secundarios.
Estos riesgos son los que, a su juicio, hay que minimizar, para que, además de proporcionar a los pacientes una sanidad de vanguardia, ésta sea "lo más segura posible".
El Plan Nacional de Calidad del Sistema Nacional de Salud recoge como una de las líneas prioritarias "mejorar la seguridad de los pacientes atendidos en los centros sanitarios del SNS". Este trabajo debe realizarse en coordinación entre las administraciones autonómicas y el Ministerio de Sanidad y Consumo.
