MADRID 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, rechazó hoy que el caso de Inmaculada Echevarría, la paciente con distrofia muscular progresiva que pidió su desconexión del respirador que la mantiene artificialmente con vida, vaya a reabrir el debate sobre la eutanasia, tras las críticas de algunas organizaciones.
En declaraciones a Europa Press, Montero defendió nuevamente el derecho de esta paciente a decidir sobre su propio tratamiento, un derecho que, resaltó, "está reconocido en la Ley de Autonomía del Paciente", y reprobó, en este sentido, las acusaciones vertidas en torno a que se pudiera reabrir el debate de la eutanasia.
"El debate --subrayó-- está en torno a si uno puede elegir su tratamiento, a que se le instaure y también a que se le retire cuando considere oportuno", no en torno a la eutanasia. "Son conceptos distintos: la eutanasia implica inyectar una sustancia o tener una actitud activa para que a una persona se le provoque necesariamente la muerte y, en este caso, se debate a propósito de la autonomía del paciente", expuso.
Inmaculada Echeverría solicitó el pasado noviembre que el equipo asistencial que le atiende en el Hospital San Rafael de Granada, donde está ingresada la paciente procediera a la desconexión de su respirador días después de firmar un testamento vital en el que expresaba su voluntad de morir si su enfermedad le hacia perder la conciencia de sus actos.
Un Comité de Ética de 25 expertos aprobó su solicitud y, según recordó hoy la consejera andaluz del departamento de Salud, ésta se emitió al Consejo Consultivo con el fin de "garantizar mayor seguridad jurídica a los profesionales". Por ello, Montero sostuvo que una vez que se conozca el dictamen del Consejo Consultivo de Andalucía, "se obrará en consecuencia".
Plataformas ciudadanas como 'Hazteoir.org' y el Foro Andaluz de la Familia coincidieron ayer en advertir acerca de la posibilidad de que el caso de Inmaculada Echeverría se "instrumentalice por algunas asociaciones afines" con el "único fin de que se reabra el debate de la eutanasia".