MADRID 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Comisión de Sanidad, Consumo y Bienestar Social ha aprobado por unanimidad una enmienda transaccional, fruto del acuerdo entre el PP, PSOE, Grupo Mixto y Ciudadanos, por la que se insta al Gobierno desarrollar las acciones necesarias para mejorar el diagnóstico y tratamiento de la fibromialgia de forma multidisciplinar, así como los criterios diagnósticos específicos basados en la evidencia disponible para evitar el retraso diagnóstico y una mejor coordinación asistencial, valorando la creación de unidades de referencia.
Y es que, aunque esta enfermedad fue reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1992 y se calcula que afecta al 2 por ciento de la población española, de los cuales el 90 por ciento son mujeres de entre 30 y 40 años, no existen pruebas diagnósticas fiables ni tratamientos que logren mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Además, tal y como ha comentado el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, Jesús María Fernández, hay un "escaso" conocimiento por parte de los profesionales médicos de la enfermedad, lo que hace que las personas afectadas tengan que peregrinar durante mucho tiempo por diferentes servicios sanitarios antes de recibir un diagnóstico.
"Pero no sólo es el retraso en el diagnóstico, sino que muchas veces estas personas se tienen que enfrentar a la incomprensión rechazo por parte de los sanitarios, así como su entorno social y familiar, siendo calificadas de hipocondriacas", ha dicho el diputado socialista.
Precisamente, el texto aprobado pide también al Ejecutivo de Pedro Sánchez que atienda a las estrategias de conocimiento y actitud social ante la fibromialgia, apostando "dedicidamente" por acciones de información, sensibilización y difusión del conocimiento sobre la enfermedad, evitando de esta forma "cualquier forma de discriminación".
EL GOBIERNO SE DEBE TOMAR "EN SERIO" LA FIBROMIALGIA
En este sentido, la diputada de Compromís, Marta Sorlí, ha lamentado, durante la defensa de la proposición no de ley presentada por el Grupo Mixto, que se trate de una enfermedad que afecta mayoritariamente a las mujeres porque, "de nuevo", son ellas las que se tienen que "arrastrar" por las consultas pidiendo un diagnóstico, o siguiendo tratamientos inapropiados para su enfermedad, mientras son tachadas de "quejicas".
"Por todas las pacientes que han sido tratadas de exageradas, que han tenido que seguir tratamientos erróneos durante años y arrastrarse por las consultas hasta encontrar un diagnóstico correcto, la Comisión de Sanidad tiene la oportunidad de mejorar su calidad de vida, de reconocer su sufrimiento y de instar al Gobierno a que tome en serio esta patología", ha recalcado Solí.
La necesidad de que desde la Cámara Baja se mejore el bienestar y calidad de vida de los pacientes con fibromialgia ha sido también destacada por la diputada del Grupo Parlamentario Popular, María Dolores Bolarín, y por el portavoz de Sanidad del Ciudadanos en el Congreso, Francisco Igea, quien, no obstante, ha destacado durante la defensa de una enmienda la importancia de que se prime la evidencia científica en todas las iniciativas que se aprueben en la Comisión.
De hecho, el último punto de la iniciativa aprobada insta al Gobierno a continuar fomentando la consideración de la fibromialgia y cuadros afines como áreas prioritarias de investigación en la Acción Estratégica de Salud del Instituto de Salud Carlos III, promoviendo los grupos de investigación sobre este problema de salud y la introducción de la variable de género en sus trabajos.
Finalmente, la diputada en el Congreso de EnComúPodem, Marta Sibina, se ha mostrado partidaria de la iniciativa, si bien ha esperado que no siga el camino del resto de proposiciones no de ley (PNL) que "de aquí se van a un cajón ministerial a coger polvo".