BILBAO 30 May. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número dos de Vitoria ha condenado a Osakidetza a indemnizar con 60.000 Euros a una paciente como consecuencia de un retraso diagnóstico de más de dos años de una vasculitis. Según refleja la sentencia, el Hospital de Galdakao extravió una resonancia magnética provocando con ello un retraso en el diagnóstico y tratamiento.
Según ha informado el 'Defensor del Paciente', en fecha 14 de diciembre de 2006, cuando la afectada tenía 36 años de edad, se le realizó una Angio-Resonancia Magnética cuyo informe fue extraviado por el Hospital de Galdakao y de la que no se dejó nota ni referencia ninguna en su historia clínica.
Cuando tras más de dos años de la realización de esa prueba, en febrero de 2009, se llegó a un diagnóstico, la paciente solicitó una segunda opinión en el Hospital Vall d'Hebron (Barcelona), encontrándose que entre la documentación que para ello le entregó Osakidetza estaba el Informe de la Resonancia realizada en 2006 que no había sido unido a su Historia Clínica, hallándose su original en el interior del sobre junto con la propia placa de la resonancia.
Ese Informe diagnosticaba ya la vasculitis que sufría pero ningún médico lo leyó, lo que demoró el diagnóstico y el tratamiento específico necesario más de dos años, durante los cuales la paciente, ante la falta de ese tratamiento específico, hubo de ser sometida a dos by-pass de coronaria, un stent en coronaria, un stent en subclavia, nueve cateterismos y otras intervenciones.
La sentencia afirma que lo ocurrido "denota una clara negligencia por parte de Osakidetza en la organización y gestión de las pruebas médicas que se ordenan y de sus resultados", aplica la doctrina de la pérdida de oportunidad y fija una indemnización de 60.000 euros por los daños y perjuicios sufridos por la paciente.
