MADRID 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los comportamientos alimentarios de los niños preescolares pueden estar asociados con el riesgo de enfermedad cardiovascular en la edad adulta, sugiere un estudio realizado con 1.076 niños de 3 a 5 años en Toronto, Ontario, Canadá, y publicado en 'Canadian Medical Association Journal'.
La investigación analizó la relación entre los hábitos alimentarios y los niveles séricos de colesterol no HDL, que es un marcador indirecto de riesgo cardiovascular más adelante. Los padres rellenaron cuestionarios de evaluación de conductas alimentarias, como ver la televisión mientras se come, la ingesta alimentaria, preocupaciones de los padres acerca de los niveles de actividad y crecimiento, y el uso de suplementos.
Los científicos midieron la altura y el peso de los niños y sus padres y tomaron muestras de sangre para analizar el perfil lipídico. Además, asignaron un nivel de riesgo en base a la etnia de los padres debido a que algunos grupos son más propensos a las enfermedades del corazón que otros.
"Nuestros resultados muestran que las asociaciones entre los comportamientos alimentarios y el riesgo cardiovascular aparecen temprano en la vida y puede ser un objetivo potencial para la intervención temprana", escribe el doctor Navindra Persaud, médico de familia e investigador en el Hospital de St. Michael, en Toronto, Ontario.
"La asociación entre la conducta alimentaria con una puntuación inferior y el colesterol no HDL en suero se mantuvo después de controlar por edad, sexo, peso al nacer, niveles de índice de masa corporal (IMC), el IMC de los padres IMC, la diabetes gestacional y la etnicidad los padres", añade.
"Nuestros resultados apoyan los argumentos anteriores para las intervenciones destinadas a mejorar los hábitos alimenticios de los niños en edad preescolar", escriben los autores. "Para ello, la evidencia sugiere la promoción de la alimentación perceptiva, donde los adultos proporcionan un acceso adecuado a los alimentos saludables y los niños usan señales internas (no señales de padres y dirigidos o señales de la televisión) para determinar el tiempo, el ritmo y la cantidad que consumen", concluyen.