MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los investigadores de la universidad de McGill, en Canadá, han realizado un estudio, mediante el cual han hallado que la densidad mineral ósea (DMO) y fuerza muscular son dos factores que juegan un papel clave en el riesgo de sufrir fractura osteoporótica.
"Estos hallazgos sugieren que las intervenciones destinadas a aumentar la fortaleza ósea tienen más probabilidades de prevenir fracturas que la administración generalizada de suplementos con vitamina D", ha declarado Brent Richards, epidemiólogo genético del Instituto Lady Davis en el Hospital General Judío y profesor de Medicina en McGill. Universidad, y uno de los investigadores principales en el papel.
Un equipo internacional de investigadores colaboró para examinar datos de 185.057 casos y 377.201 controles, parte del Consorcio de Factores Genéticos de la Osteoporosis (GEFOS), el Estudio UKBiobank y la empresa de biotecnología '23andMe'. El estudio fue codirigido por investigadores de la Universidad McGill y el Erasmus University Medical Center en Rotterdam, Países Bajos.
"Nuestra investigación confirma que la densidad mineral ósea es el determinante más importante del riesgo de fracturas y que las estrategias de prevención destinadas a aumentar o mantener la densidad ósea tienen más probabilidades de ser exitosas", ha aclarado Richards.
Asimismo, uno de "los aspectos más importantes de esta investigación es la evidencia sólida que muestra que la suplementación de vitamina D en la población general es poco probable que sea efectiva para la prevención de fracturas. Esto alentará a los médicos a enfocar a los pacientes en la construcción de densidad ósea como un preventivo más efectivo medida contra la fractura".
Por último, los investigadores llegaron a estas conclusiones al demostrar que los factores genéticos que conducen a la disminución de los niveles de vitamina D en la población general no aumentan el riesgo de fractura.