MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
La combinación de terapias génicas realizadas a través de nanopartículas basadas en lípidos reduce el número y tamaño de los tumores cancerígenos de células no pequeñas de pulmón en ratones, según un estudio del Centro del Cáncer M.D. Anderson de la Universidad de Texas y el Centro Médico de la Universidad de la Universidad de Texas Southwestern (Estados Unidos) que se publica en la revista 'Cancer Research'.
La investigación muestra que dos genes que suprimen los tumores, el p53 y el FUS1, que se proporcionaron vía intravenosa a ratones redujeron el cáncer de forma separada pero tuvieron su efecto más destacado al ser administrados en conjunto. Tal combinación redujo el número de tumores por ratón un 75 por ciento y el peso de los tumores un 80 por ciento.
Los genes "envueltos" en las nanopartículas fueron el p53, conocido por su capacidad supresora de tumores al provocar células defectuosas que se autoeliminan y a menudo se encuentra desactivado o alterado en las células cancerígenas, y FUS1, un gen anticancerígenos ausente en la mayoría de los tumores de pulmón humanos, según han descubierto los investigadores del estudio.
El estudio muestra que el FUS1 funciona con p53 para forzar a las células del cáncer de pulmón a pasar por la apoptosis, un proceso a través del cual la propia célula provoca su desaparición, una especie de suicidio celular.
Estudios posteriores mostraron que la combinación consiguió una mayor tasa de apoptosis debido a que FUS1 suprime un gen que expresa una proteína que se sabe degrada rápidamente a p53. La combinación FUS1/p53 también activa un mecanismo de suicidio celular basado en las mitocondrias de las células, los elementos internos de la célula que producen la energía que ésta necesita.
Los experimentos de laboratorio mostraron primero que la combinación genética suprimió el número de células viables en cuatro líneas de cáncer humano de células no pequeñas entre un 70 y un 80 por ciento unas 48 horas después del tratamiento mientras que no afectaron a un grupo control de células normales. Las líneas de células cancerígenas tratadas con la combinación genética tenían entre dos y tres veces más células eliminadas por apoptosis que las terapias genéticas por separado. Estos resultados fueron más tarde confirmados en estudios con ratones.
Las nanopartículas administradas se acumulan principalmente en los pulmones, en concreto en los tumores, señala Lin Ji, profesor asociado del M.D. Anderson de cirugía torácica y cardiovascular y autor principal del estudio. Las nanopartículas cargadas positivamente se administran a la membrana celular del cáncer cargada negativamente consiguiendo entrar en la célula, donde los genes de forma repetida expresan las proteínas de los genes antitumorales p53 y FUS1.
Los investigadores esperan llevar la combinación de terapias a los ensayos clínicos en los próximos años, ya sea con genes en conjunto o con genes y otros agentes biológicos o de quimioterapia.