CMancha.-El H. de Parapléjicos de Toledo alberga una muestra de vehículos adaptados para personas con movilidad reducida

Actualizado: lunes, 22 junio 2009 19:04

TOLEDO 22 Jun. (EUROPA PRESS) -

La empresa Vía Libre, del grupo FUNDOSA (ONCE), presentó hoy en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo una muestra de vehículos dotados de las más recientes innovaciones tecnológicas, para facilitar la accesibilidad, la conducción y, en definitiva, una mayor autonomía de usuarios de sillas de ruedas que conducen.

Entre las nuevas incorporaciones tecnológicas de los vehículos destaca un sistema robotizado para carga y descarga de la silla de ruedas desde el puesto de conductor hasta el maletero, informó el Hospital en un comunicado.

Esta ayuda técnica consta de un brazo eléctrico que sale del maletero para recoger la silla plegada, una vez que el conductor está en su asiento, la introduce hasta el maletero y lo cierra. A la inversa, el maletero se abre y saca la silla del maletero hasta dejarla al alcance del conductor para desembarcar.

Asimismo, pacientes y profesionales del centro han podido conocer otras novedosas adaptaciones técnicas al servicio de conductores con movilidad reducida, como el cajeado trasero del vehículo para el acceso con silla de ruedas, e innovaciones tecnológicas, como los sistemas de satélite multifunción, que simplifican el manejo de todos los accesorios del vehículo desde un único mando.

También asientos giratorios y tablas de transferencias que permiten al usuario transferirse al interior del vehículo con facilidad o el freno de mano eléctrico. y un novedoso scooter "Pendel", ecológico, eléctrico para conducir desde la propia silla de ruedas, entre otras ayudas técnicas.

La demostración ha contado con la presencia del director corporativo de coordinación de empresas filiales de Fundosa, Ignacio Tremiño y el gerente de la empresa de adaptación de vehículos Caradap, Manuel Romero, además de personal técnico de la empresa.

En el Hospital de Parapléjicos de Toledo, dependiente del Gobierno de Castilla-La Mancha, unos cien pacientes cada año obtienen el carné de conducir a lo largo de su proceso asistencial y tras asistir a un curso práctico para vehículos adaptados, con el fin de aumentar su movilidad e independencia personal.