MADRID 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
"El sector de la cirugía plástica será uno de los que más se podrá beneficiar de los avances de la medicina regenerativa", asegura la doctora Gemma Pons, cirujano plástico miembro de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) en marco de su XLVII Congreso Nacional.
En general, los objetivos de la medicina regenerativa se basan en proporcionar los elementos necesarios para la reparación 'in vivo' para estimular al propio organismo a autorepararse, por medio del uso las células madre, la ingeniería tisular o la terapia génica.
Concretamente, una de las dos grandes líneas de investigación en las que se divide esta disciplina se centra en la cicatrización de heridas y en el fortalecimiento del sistema inmunológico para reducir el rechazo de órganos en trasplantes.
"Aunque la medicina regenerativa se encuentra, básicamente, a nivel de investigación científica, su aplicación en el campo de la medicina en general, y de la cirugía plástica en particular, tiene un gran potencial", ha insistido esta experta.
En relación a la reconstrucción mamaria post-mastectomía, el trasplante de tejido adiposo, es decir la inyección de grasa de la propia paciente, que contiene células madre pluripotenciales, es una de las aplicaciones pioneras de la medicina regenerativa en cirugía plástica, y con la que se están consiguiendo resultados prometedores.
"Esta técnica consigue restaurar la mama en casos de resecciones parciales y refinar reconstrucciones mamarias llevadas a cabo con otras técnicas", ha precisado Pons.
Otras de las aplicaciones de la medicina regenerativa es la utilización de matrices tisulares, que actúan como 'andamios' que redirigen al propio organismo para crear nuevos tejidos.