Trasplantes con órganos ilegales

Inteevención de trasplante renal vivo
HOSPITAL PESET
Actualizado: martes, 17 noviembre 2015 13:35

   MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

   Un 8 por ciento de los más de 100.000 trasplantes que cada año se realizan en el mundo se practican con órganos procedentes del trádico ilegal, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que trabaja por combatir estas prácticas fomentando la implantación de sistemas de donación y trasplantes similares al español, líder en este campo.

   "La demanda de órganos es cada vez mayor", ha asegurado el español José Ramón Núñez, director médico del Programa de Donación y Trasplantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que de hecho reconoce que cada año se deberían realizar más de un millón de trasplantes para cubrir las necesidades a nivel mundial.

   Este experto, que ha participado este martes en el noveno Congreso Europeo de Pacientes, Innovación y Tecnología que se celebra en Madrid, asegura que ese "disbalance entre la oferta y la demanda" es el que da lugar al tráfico de órganos, también conocido como turismo de trasplantes, del que se benefician personas "con un elevado poder adquisitivo" a costa de "la vulnerabilidad y la miseria" de la población con menos recursos.

   El problema, según ha reconocido Núñez, es que al tratarse de una práctica ilícita se desconoce la dimensión real del problema y las cifras de su impacto proceden sólo de estimaciones.

   De hecho, los últimos datos de la OMS son de 2009 y apuntaban a que el tráfico ilegal afectaba a un 10 por ciento de los trasplantes realizados en el mundo, si bien considera que el trabajo realizado en los últimos años podría haber mejorado levemente la situación, a pesar de que el aumento de enfermedades crónicas como la hipertensión o la diabetes hace que "cada vez se necesiten más órganos".

   Este dirigente de la OMS ha reconocido que este problema afecta sobre todo a los trasplantes de riñón y "ningún país está exento de estas prácticas". En términos generales, el perfil del comprador son personas "que pueden permitirse pagar entre 150.000 y 200.000 por el trasplante" procedentes de Europa, Estados Unidos, Israel o los países árabes.

   Pese a que en los países más desarrollados sí existen sistemas más avanzados de donación y trasplante de órganos, este experto reconoce que el problema está en "la elevada lista de espera".

   De hecho, se estima que en la Unión Europea se realizan cada año unos 30.000 trasplantes pero, pese a todo, más de 67.000 siguen en esperando un órgano. "Y eso podría explicar que haya quien busque desesperadamente un órgano como sea".

   En cuanto al donante o vendedor, suele ser gente que vive "en situaciones de miseria o pobreza extrema, hasta el punto de ser capaz de vender un riñón para sacar adelante a su familia", y entre los países más afectados están La India, Pakistán, Filipinas y algunos de América Latina, aunque "las mafias se van moviendo en busca de nichos de pobreza".

 UN ÓRGANO A CAMBIO DE UN iPAD

   "En la India ha visto casos de chavales que han vendido un riñón a cambio de un 'iPad'", ha reconocido Núñez, que denuncia la presencia de "auténticas mafias" que controlan estas prácticas con la complicidad de profesionales y centros sanitarios. "Para que un trasplante ilegal se produzca debe haber médicos e instalaciones involucrados", según ha denunciado.

   Ante esta situación, la OMS trabaja con el doble objetivo de animar a los países más demandantes adapten su legislación para "evitar que sus enfermos no recurran a estas prácticas" y que los países más desfavorecidos "protejan a sus ciudadanos con la ayuda sanitaria que precisan y controlando que nadie pueda recurrir a prácticas ilícitas".

   Este experto ha celebrado la "celeridad" con la que España ha modificado su legislación cuando se han detectado posibles casos de compra de órganos para endurecer las penas con independencia de el trasplante ilegal sea en España o en otro país, que actualmente ascienden a 12 años de cárcel más cinco veces el valor de lo pagado por el trasplante.

   Asimismo, ha destacado los avances que se han conseguido en algunos países que hasta hace años eran víctimas del tráfico ilegal de órganos como Qatar, que ha elevado su tasa de donantes gracias a un sistema equitativo en el que la población inmigrante "dona porque también pueden ser receptores"; o China, que ha cambiado su legislación para prohibir que los extranjeros puedan ser someterse a un trasplante en este país o que "los órganos puedan asignarse de forma discrecional".

   "Si todos pudieran acceder a los trasplantes de forma gratuita y el sistema estuviera cubierto por el sistema, no se produciría el tráfico de órganos", ha concluido Núñez.

   5 COSAS QUE QUIZÁS DESCONOZCAS SOBRE EL TRÁFICO DE ÓRGANOS

   La operación de la Policía Nacional para abortar el primer intento de compraventa de órganos detectado en España ha sacado a la luz una vez más un problema que, de normal, permanece oculto bajo las sombras de las mafias.

   Aquí te contamos cinco cosas que quizás desconozcas sobre este tráfico:

   1.- El 10% de los trasplantes que se realizan en el mundo proceden del tráfico ilegal de órganos. En España los trasplantes están rigurosamente controlados por la normativa que impide este tipo de tráfico, bajo pena de 12 años de cárcel.

   2.- Los donantes suelen ser personas de países pobres, como Pakistán, Costa Rica o Perú, que "se ven obligados por sus circunstancias personales a vender uno de sus órganos para subsistir ellos y sus familias", según explicó el año pasado el responsable de trasplantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el español José Ramón Núñez.

   3.- Por un riñón se puede llegar a pagar 200.000 dólares en el mercado negro, según la OMS.

   4.- Los riñones son los órganos más demandados en este mercado negro, llegando a representar hasta alrededor del 70 por ciento de este comercio.

   5.- Recientemente Perú ha cambiado la ley para que un ciudadano no pueda ser incluido en una lista de espera para una operación hasta que no lleve dos años residiendo en el país. Con este cambio pretende evitar que la gente vaya allí a trasplantarse.