CHICAGO 22 Mar. (Reuters/EP) -
Algunas 'señales enviadas' por las células de los huesos podrían causar ciertos tipos de cánceres de la sangre, por lo cual interrumpir esa comunicación podría ofrecer un nuevo enfoque en el tratamiento de la leucemia, según sostiene una investigación desarrollada por miembros del Instituto de Células Madre de Harvard (EE.UU.).
"Generalmente se cree que el cáncer está causado por una única célula que comienza a funcionar mal porque empieza a acumular una serie de heridas genéticas", explicó el doctor David Scadden en la revista 'Nature'.
Sin embargo, el equipo de Scadden descubrió que ciertos cambios genéticos en las células óseas, donde residen las células madre de la sangre, pueden hacer que los ratones desarrollen mielodisplasia, una condición que puede conducir a una aguda forma de leucemia.
Estudios en ratones mostraron que cuando el equipo alteraba un gen en las células óseas llamado 'Dicer1', también se producía un efecto dañino en las células madre de la sangre.
"La sangre comenzó a tener el aspecto de una enfermedad humana muy poco conocida llamada mielodisplasia", dijo Scadden, que dirige el Centro de Medicina Regenerativa del Hospital General de Massachusetts. "Tiene la complicación de desarrollar leucemia", explicó, que es exactamente lo que hicieron algunos de los animales en el estudio.
"La razón por la cual esto es tan importante es que demuestra que el entorno puede convertirse en una parte fundamental de la función del tejido, lo que provocaría la emergencia de nuevas anormalidades genéticas que serían fatales para todo el organismo" dijo Scadden.
Por otra parte, señaló que los resultados ofrecen un nuevo entendimiento de la fuente de algunos cánceres, que puede provenir de células exteriores. Asimismo, sostiene que interrumpir la comunicación entre las células de alrededor y las células cancerígenas podría ofrecer un nuevo enfoque para desarrollar fármacos oncológicos.