BRUSELAS, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea va a prohibir totalmente la entrada de alimentos provenientes de China y destinados a niños o bebés que contengan "algún porcentaje" de leche, según informó hoy la portavoz comunitaria de Salud, Nina Papadoulaki. Bruselas reacciona así al dictamen de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) que advierte del riesgo para los pequeños que ingieran grandes cantidades de productos derivados de leche que pudieran estar contaminados con melamina.
Además de la "prohibición total" que lanzará sobre los productos destinados a niños y bebés --tales como chocolate o galletas--, el Ejecutivo comunitario incluye entre las "medidas de precaución" la realización de pruebas a "todos los productos procedentes de China que contengan más de un 50% de leche como ingrediente" y "de manera aleatoria a los productos alimenticios procedentes de China que ya están en el mercado comunitario". Estas medidas están siendo discutidas con los Estados miembros y "se espera que sean adoptadas mañana", precisó Papadoulaki.
La portavoz comunitaria insistió en que se trata de medidas "de precaución" y aseguró que "el consumidor europeo está protegido". Desde hace aproximadamente diez días, se realizan pruebas sobre alimentos con componente lácteo procedentes de China y "hasta ahora no hay productos contaminados", afirmó.
Por el momento, la prohibición sólo afectará a productos específicos para niños o bebés y no a aquellos para adultos, puesto que la EFSA no considera que haya un riesgo de intoxicación para estos últimos.
"Si los adultos en Europa consumieran chocolates o galletas que contuvieran leche en polvo contaminada, no superarían el índice diario tolerado (0,5 mg/kg del peso corporal), incluso en el peor de los casos", explicó la agencia europea de seguridad alimentaria en un comunicado.
Sin embargo, la agencia precisa que si bien los niños con un "consumo principal de galletas, caramelos y chocolate con este tipo de leche" tampoco excederían el índice diario tolerado por el cuerpo, "en el peor de los casos, con un alto nivel de contaminación", sí existiría un riesgo para la salud del pequeño. Así, aquellos niños que consuman alimentos con altos niveles de leche contaminada "pueden exceder el índice tolerado en más de tres veces".