MADRID 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
Tras un análisis pormenorizado de las cuentas sanitarias autonómicas, el Sindicato de Enfermería Satse ha constatado un descenso superior al 7 por ciento de media en los presupuestos que las diferentes administraciones autonómicas destinarán el próximo año a sanidad.
Las comunidades autónomas más castigadas por ir a la cabeza del recorte serán Murcia (13% menos), Extremadura (12%) y Andalucía y Aragón, con un 10 por ciento menos de presupuesto; les siguen la Comunidad Valencia (9,6%), Madrid (7%), Navarra (6,3%) y Castilla y León con un 5,3 por ciento menos.
Al respecto, su secretario general, Alejandro Laguna, critica que los responsables públicos continúen con su política de recortes impuestos e indiscriminados, que solo conllevan graves perjuicios para los profesionales y ciudadanos, en lugar de ser "valientes "y emprender medidas de eficiencia y optimización de recursos.
Por debajo del 5 por ciento se encuentran Castilla-La Mancha (4,5%), Baleares (3,8%), Rioja (3%) y Canarias (1,2%). Cantabria, por el contrario, contempla un aumento "ficticio" presupuestario del 0,72 por ciento, según Satse.
El sindicato no dispone de los datos de Asturias, País Vasco, Cataluña y Galicia, ya que aún sus presupuestos cerrados para el próximo año no están cerrados, al haberse producido recientemente procesos electorales.
Para la organización, estos recortes en el presupuesto constata el escaso interés de los diferentes gobiernos por priorizar en lo realmente importante y, al menos, mantener, sino aumentar, el montante económico destinado a sus respectivos sistemas sanitarios.
Laguna ha insistido en que los distintos Gobiernos hacen "oídos sordos" a los ciudadanos que, según el último Barómetro del CIS, sitúan una vez más a la sanidad como uno de los problemas que más les preocupan en nuestro país, y vuelven a reducir el gasto público destinado al mantenimiento del sistema sanitario.
El descenso generalizado en las cuentas previstas para 2013 propiciará en todas las autonomías "una merma en la calidad de la atención a los pacientes", así como en las condiciones laborales de los profesionales, al continuar cerrándose servicios y camas, aumentando las listas de espera, o reduciendo las plantillas en los centros.