BARCELONA 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
Más de 250 facultativos han condenado este miércoles los recortes sanitarios en el Hospital Vall d'Hebron de Barcelona, en una concentración convocada por el sindicato mayoritario Médicos de Cataluña (MC) a las puertas del hospital.
La delegada de MC en el centro y una de las impulsoras del manifiesto suscrito por 2.000 médicos hospitalarios contra los recortes, Rosa Boyè, y la representante médica en la Junta Clínica del centro, Roser Solans, han advertido de los efectos negativos de los recortes a medio plazo y del "desmantelamiento" del hospital con la reducción del 9 por ciento del presupuesto.
Boyè ha evidenciado que el hospital funciona, desde la semana pasada y hasta la siguiente, con un 40 por ciento menos de camas y de quirófanos, como también lo hará desde el 1 de junio hasta el 30 de septiembre, pero ha confiado en que la Conselleria de Salud de la Generalitat replantee las medidas de choque en el centro.
En total, se dejarán de practicar 5.000 operaciones quirúrgicas cada año, y no todas ellas corresponderán a patologías leves, ya que además de la práctica desaparición de la cirugía ortopédica de prótesis de rodilla y cadera, también se verá afectada la lista de cirugía cardiaca, oncológica de mama y de fístulas arterio-venosas para pacientes de diálisis.
Ambas representantes han reclamado de nuevo al conseller de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, que "ponga el contador a cero" y se replantee los planes de ajuste que, a su juicio, tanto daño harán a uno de los sistemas sanitarios considerado de los mejores del mundo.
En el acto de MC, distinto al convocado a las 13 horas también a las puertas del hospital para cortar la Ronda de Dalt, Boyè ha criticado que las medidas obligan a transformar el Vall d'Hebron en un "hospital de primera línea de batalla de urgencias", que ha obviado que se van a atender.
No obstante, la representante de la Junta Clínica ha planteado cuál será el rumbo de una gran parte de pacientes que también requerirán camas y ser atendidos, y ha advertido que el Vall d'Hebron es un hospital terciario de referencia que atiende numerosas desviaciones de pacientes y que con los ajustes de centros concertados deberá atender a una mayor presión de enfermos.
MÉDICOS NO PREGUNTADOS
La grave situación ha llevado, según Solans, a reunir a todas las juntas clínicas de hospitales de la red pública del Instituto Catalán de la Salud (ICS) que lamentan no haber sido preguntados para la elaboración de los planes de ajuste de sus hospitales, como se comprometió la Conselleria y pidió a los gerentes.
Con todo Solans, ha comprendido la "compleja" tarea de los gestores hospitalarios a la hora de reducir de forma significativa su presupuesto, y ha pedido que se lleven a cabo medidas de ahorro de otro tipo y especialmente del ámbito de la farmacia.