BARCELONA 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Servicio Catalán de la Salud (CatSalut) ha aceptado indemnizar con 42.000 euros a un menor al cual le tuvieron que extirpar el testículo derecho tras un diagnóstico erróneo por parte de los sanitarios del Hospital Sant Antoni Abat de Vilanova i la Geltrú (Barcelona), según ha avanzado este martes el Defensor del Paciente a través de un comunicado.
El acuerdo, alcanzado por el CatSalut y la familia del afectado y cuyo pago debe hacerse efectivo antes de 30 días, constata que el paciente, entonces de 13 años, acudió al centro sanitario en diciembre del 2008 con un fuerte dolor en el testículo tras golpearse contra una mesa, y los especialistas le enviaron a casa tras recetarle un analgésico oral para tratar una posible dispepsia intestinal, si bien "no le exploraron" la zona pélvica.
Ante la persistencia del dolor, los padres acompañaron al menor al día siguiente al servicio de urgencias del Hospital Sant Camil (Barcelona), donde los sanitarios decidieron remitirlo al servicio de urología del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona), donde se le detectó una torsión testicular derecha no reversible que precisó la extirpación del citado órgano.
El Defensor del Paciente ha recordado que, en la primera exploración en el Hospital Sant Antoni Abat, únicamente le practicaron una radiografía de abdomen y una analítica al paciente y no le exploraron el testículo afectado, por lo que se efectuó un diagnóstico erróneo debido a "la falta de pruebas diagnósticas y a la incorrecta interpretación de la sintomatologia".
Así, se establece una relación directa entre la asistencia prestada y el daño reclamado por el error diagnóstico, algo que el CatSalut ha admitido a través del pago de la indemnización, aceptado antes de que el juzgado contencioso administrativo número 4 de Barcelona se pronunciara al respecto.
"El tiempo transcurrido desde que se dieron los primeros síntomas hasta la intervención quirúrgica hicieron imposible conservar el testículo", ha recordado el Defensor del Paciente.
CONDENA EN OCTUBRE
Hace poco más de un mes, el juzgado contencioso administrativo número 7 de Barcelona ya condenó al CatSalut a indemnizar con 50.300 euros a un joven de 21 años al que le tuvieron que extirpar el testículo izquierdo fruto de un diagnóstico erróneo.
La sentencia constataba que el paciente acudió a la Clínica Platón de Barcelona en enero de 2008, aquejado de una inflamación en el testículo izquierdo y fuertes dolores, si bien los especialistas del centro descartaron una infección urinaria y lo enviaron a casa tras recetarle un analgésico oral.
Cinco días después, al no remitir el dolor, el joven acudió al Hospital Clínic, donde le practicaron una ecografía en la que se apreció una torsión del testículo, por lo que se le realizó una extirpación.
La sentencia recordaba que, en la primera visita, al paciente solo se le practicó una exploración física y un análisis de orina, cuando "debía haber sido examinado por un urólogo y hacerle una ecografía testicular".