El exgerente del Hospital Sant Pau de Barcelona justifica el pago a exaltos cargos del Gobierno

Jordi Varela
EUROPA PRESS
Actualizado: jueves, 7 junio 2012 14:46

BARCELONA 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

El hasta ahora gerente del Hospital Sant Pau, Jordi Varela, ha defendido este jueves ante el titular del Juzgado de Instrucción 22 de Barcelona la ausencia de "irregularidades" en el centro, y ha justificado los presuntos pagos irregulares a exdirectivos del centro asegurando que tenían una función delegada.

Ha señalado que al exalto cargo del Gobierno central Ricard Gutiérrez (PSOE), que figuraba como director adjunto en el hospital durante siete años sin llevar propiamente las riendas del centro, se le encomendó la tarea de liderar la Cátedra de gestión sanitaria de la Fundación Doctor Robert y la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), ha explicado el abogado de Varela, Rafael Entrena, a la salida de la declaración del exgerente imputado.

Según la denuncia de los trabajadores, Gutiérrez fue contratado en 2001 como adjunto a la gerencia del hospital, cargo que dejó en 2004, pero continuó cobrando hasta 2011, hasta un total de 700.000 euros, sin que los empleados conocieran su función específica.

En cuanto al sueldo percibido por el exdelegado de la Generalitat en Madrid, exteniente de alcalde de Barcelona y vocal del instituto de Investigación Biomédica del hospital, José Ignacio Cuervo (PSC), el exgerente ha explicado que realizó con "plena satisfacción" un proyecto de investigación por un tiempo de medio año.

"Los trabajadores del Sant Pau desconocen" en qué y dónde trabajaba dentro del hospital pese a constar como empleado, según señala la denuncia presentada inicialmente por la médica Carmen Pérez y ahora por la Asociación Profesional de Enfermería (Api) como acusación popular.

En cuanto al contrato para amueblar el hospital con la empresa Philips, ha argumentado que él lo realizó en 2008 según la legislación de contrato público vigente y que en todo caso se limitó a actualizarlo, si bien la firma inicial se había producido en años anteriores bajo la gerencia de Josep Anton Grau y Jordi Colomer.

Entrena ha insistido en que Varela "no ha reconocido ninguna irregularidad, porque según su conocimiento no ha habido ninguna irregularidad", y próximamente hará llegar al juez documentación conforme a las infundadas acusaciones de los trabajadores, ha añadido el abogado.

Ha contestado a todas las preguntas del juez y ha dejado claro que su gestión ha sido "impecable", así como ha señalado que Varela se encontró una serie de acuerdos absolutamente justificados y coherentes.

El abogado de Api y del comité de empresa, Vicente López, ha explicado que pedirán la comparecencia ante el juez de los exgerentes Grau y Colomer para que den explicación del contrato con Philips firmado inicialmente en 2003 sin concurso público por Grau para amueblar el nuevo hospital.

Según López, Varela ha admitido que un contrato debe firmarse por concurso público, y que éste debe ser aprobado por el patronato del centro, y ha señalado que él así lo hizo en el mantenimiento del contrato en 2008.

En cuanto a los honorarios recibidos por el representante del Arzobispado de Barcelona en el patronato Joan Ros Petit, Varela ha señalado desconocer la existencia de éstos, alegando que Ros pertenece a la fundación patrimonial del centro, ha explicado el abogado de la acusación.

DEFIENDE SU "HONORABILIDAD"

En una escueta comparecencia ante los medios, Varela, cesado en marzo de este año tras la intervención del hospital por parte de la Generalitat, ha celebrado estar "muy satisfecho" de tener la oportunidad de defender la honorabilidad de su gestión ante el juez, en el marco de un proceso que pondrá a todas las personas en su lugar, ha dicho.

También ha lamentado que "haya personas suficientemente malintencionadas y sin escrúpulos que lleven a la justicia penal cosas que deberían haber defendido o haber querido defender ante un conflicto laboral".