TOLEDO 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un total de 200 médicos y enfermeras pertenecientes a los dispositivos de urgencias y emergencias de la región han participado en el I Curso de Avances en la Atención Prehospitalaria al Traumatismo Craneoencefálico (TCE), organizado por la Gerencia de Urgencias, Emergencias y Transporte Sanitario del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha.
La incidencia del traumatismo craneoencefálico en la actualidad alcanza valores cercanos a los 400 casos por cada 100.000 habitantes al año, constituyendo la primera causa de muerte a nivel mundial en el rango de edad entre 15 y 40 años. Está presente en dos tercios de todos los traumatismos mortales y provoca gran número de discapacidades en la población laboral activa.
En Castilla-La Mancha, a lo largo del año pasado los dispositivos de emergencia atendieron a 722 pacientes con traumatismos craneoencefálicos con diferentes grados de gravedad, informa la Junta en nota de prensa.
El objetivo general del curso desarrollado en el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha sido revisar y presentar las últimas recomendaciones en el diagnóstico, tratamiento y cuidados a realizar en los pacientes que sufren traumatismo craneoencefálico en el medio extrahospitalario.
En este sentido, durante las clases los alumnos han discutido sobre el momento y el lugar más idóneo para iniciar el tratamiento del traumatismo craneoencefálico, así como los conceptos básicos de fisiopatología, clasificación y clínica más relevante de esta patología.
Asimismo, analizaron la utilidad del centro útil, aquel que puede brindar, sobre todo a los pacientes con un traumatismo craneoencefálico, un tratamiento neuroquirúrgico y de cuidados intensivos.
TRATAMIENTO EN LA ESCENA
También revisaron el tratamiento en la escena donde se produce el traumatismo y su impacto en el control del insulto secundario, es decir, de los daños que se producen como consecuencia del edema --hemorragia cerebral o daños por hemorragias en otras partes del cuerpo--.
Otra de las cuestiones que se abordó dentro del programa formativo fue las diferencias entre el TCE y el trauma multisistémico sin lesión neurológica, pero en el que se ven afectados varios órganos, aparatos o sistemas, como el trauma torácico o el trauma abdominal. En estos casos, el paciente sin TCE, puede desarrollar un daño cerebral, por las alteraciones respiratorias y/o circulatorias que se producen como consecuencia de esos otros traumatismos y que producen una falta de oxigeno a nivel cerebral. Es el caso del paciente con shock hemorrágico.
Por otra parte, se analizó la necesidad del aislamiento de la vía aérea y de la oxigenación, el control cervical y hemodinámica y la movilización del paciente con traumatismo craneoencefálico. Además, se abordó el manejo del paciente ante la sospecha de hipertensión intracraneal, la importancia del control de la temperatura, los tiempos prehospitalarios, así como el tipo de transporte.