Casi el 79% de las farmacéuticas han sufrido caídas de sus ventas a causa de los reales decretos de 2010

Presentación Encuesta KPMG
KPMG
Actualizado: jueves, 3 noviembre 2011 14:38

MADRID 3 Nov. (EUROPA PRESS) -

Casi el 79 por ciento de las farmacéuticas nacionales e internacionales que operan en España han experimentado una caída de sus ventas a causa de los tres reales decretos aprobados por el Gobierno durante el año 2010. Cerca de la mitad de estas empresas (40%) han sufrido una reducción de entre el 5 y el 15 por ciento.

Así lo recoge la primera edición del estudio 'KPMG Pharma Survey: Situación de la industria farmacéutica en España', una encuesta realizada entre los pasados mayo y junio a 50 directivos de compañías farmacéuticas nacionales (34%) y multinacionales con sede en España (55%), entre las que se encuentran empresas con una facturación de más de 300 millones (36%), de entre 50 y 300 millones (53%) y de menos de 50 (11%).

Según este trabajo, entre las farmacéuticas afectadas por los reales decretos, un 10,64 por ciento ha experimentado caídas de ventas de entre el 15 y el 25 por ciento y sólo un 4,26 por ciento ha visto bajar sus ventas en más de un 25 por ciento.

Destaca, al mismo tiempo, que un 8,5 por ciento de estas empresas ha vendido más tras los reales decretos, un fenómeno que puede deberse a que se trate de empresas de genéricos o biotecnológicas, que se han visto menos afectadas por estas medidas del Gobierno, según ha apuntado el director de KPMG para el sector Farmacéutico, Gregorio Díaz.

Los empresarios dicen que han sido el precio (89%), el marketing y los costes de ventas (57%) y el volumen de unidades venidas (55%) las magnitudes de negocio más afectadas por las actuales circunstancias legales.

Les siguen la política de circulante (36%) --lo que se traduce en una mayor necesidad de financiación--, el número de empleados (32%) y las inversiones en I+D (19%), que no se han visto tan perjudicada como se preveía, admite el responsable en KPMG España del sector químico y farmacéutico, José Antonio del Castillo.

LO QUE MÁS PREOCUPA AL SECTOR

En la actualidad, la reducción de precios de los medicamentos es la principal preocupación del sector (85%). También preocupan, aunque menos, los retrasos en el cobro de la deuda hospitalaria (57%), la falta de unidad del mercado (29%) y la incertidumbre sobre la compensación económica a la inversión en I+D (27%).

Dentro de las propias empresas, los temas que más preocupan son la capacidad que se tendrá para mantener los márgenes (91%), pero también quita el sueño la gestión del capital circulante (61%), la protección de la propiedad intelectual (51%) y la capacidad de atraer y retener a profesionales cualificados (34%). Sólo el 34 por ciento de estos directivos están inquietos por la posibilidad de que se ponga en riesgo la cadena de suministro farmacéutico a causa de las nuevas circunstancias.

Ante la actual situación, la mayoría de estas compañías están apostando por la reducción de los costes generales (76%), la redefinición de su fuerza de ventas (47%) y la búsqueda de crecimiento en otros mercados (42%).

Asimismo, se están abandonando las líneas de negocio menos rentables (31%), se opta por la externalización de los procesos no críticos (27%) y, en sexto lugar de la lista, por la reducción de personal, que es una opción para el 25 por ciento.

En paralelo, las estrategias preferidas para aumentar los ingresos son acelerar la introducción de nuevos productos en el mercado (70%), fortalecer las relaciones con las administraciones central y autonómica (44%) y acelerar la diversificación geográfica en nuevos mercados (40%). Sólo el 14 por ciento piensa que la solución podría estar en centrarse más en el cliente final del fármaco, que es el paciente.

LAS CLAVES DE LOS PRÓXIMOS 12 MESES

Para estos directivos, en los próximos 12 meses, las claves en el sector las marcarán los precios y el entorno regulatorio (83%), el desarrollo de nuevos productos o el retraso en el lanzamiento de otros (66%), el vencimiento de patentes (61%) y la reducción de costes (51%).

De cara al futuro, la mayoría piensa apostar por establecer alianzas con otras farmacéuticas (36%), desarrollar una cartera sólida de I+D (34%) o potencial el conjunto de actividades que viene realizando la empresa con incrementos en el volumen y los precios (34%).

Sólo para el 21 por ciento la reducción de costes operativos será clave para el futuro y únicamente el 4 por ciento cree que la apuesta segura será reclutar y retener a los mejores profesionales. Nadie parece apostar por incrementar la responsabilidad corporativa y la reputación financiera.

Según el director de KPMG para el sector farmacéutico, el impacto de los tres reales decretos lanzados en 2010 --ya que esta encuesta se hizo antes de la entrada en vigor el pasado 1 de noviembre del Real Decreto Ley 9/2011, que instaura la prescripción por principio activo-- ha venido a sumarse a otras circunstancias que han tocado al sector, como la crisis o el vencimiento de muchas patentes.

Así, esta encuesta refleja las preocupaciones de los agentes del sector ante una nueva realidad, en la que han cambiado claves, como el papel del farmacéutico en la prescripción de fármacos o la interlocución con la administración, que ha pasado de ser una a convertirse en 17 gobiernos autonómicos.

SIN CRECIMIENTO PARA LOS PRÓXIMOS CINCO AÑOS

Para Del Castillo, las nuevas circunstancias harán "que las tasas de crecimiento de la industria caigan en los próximos cinco años", frenando el periodo de crecimiento que había mantenido en los últimos 10 años.

Así, el objetivo ahora es cambiar de estrategia en campos como la investigación, donde la meta ahora no es "la búsqueda de nuevos fármacos 'blockbuster' (superventas), sino quizá el desarrollo de nuevos medicamentos que interesen a colectivos menores".

Otro camino para avanzar podrían ser las alianzas y la búsqueda de nuevos mercados, en otros territorios, orientándose a mercados emergentes que no se centrarían ahora en Latinoamérica por su cercanía cultural o idiomática con España, sino que se orientaría a países emergentes como China, Turquía, Rusia o India.

Según Del Castillo, la diversificación geográfica medida por esta encuesta no ha contemplado valorar si, con el actual panorama regulatorio español, las farmacéuticas están pensando en reducir su presencia en este país. No obstante, estos expertos reconocen que España podría haber perdido atractivo como país para invertir, a ojos de las empresas internacionales del sector.

A juicio de Del Castillo, no se trataría de que el gobierno que salga de las elecciones del próximo 20 de noviembre diera marcha atrás a los reales decretos que han afectado al sector, sino de que decida abandonar el camino de la reducción de precios, que podría no ser sostenible, y apueste por "otras medidas adicionales".