MADRID 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, ha avisado de que "no sirve de nada tomar una pastilla" si no se tiene una voluntad "real" de querer dejar de fumar, por lo que ha comentado que la prescripción de la vareniclina, el fármaco para ayudar a dejar de fumar que va a financiar a partir del 1 de enero de 2020 el Sistema Nacional de Salud (SNS), dependerá de que la persona que lo solicita cumpla este requisito.
"El medicamento se aprueba y se incorpora al SNS con unos requisitos y, de ellos, el más importante es que haya una voluntad real de dejar de fumar, de acabar con la adicción a la nicotina", ha aseverado Carcedo tras la reunión del Consejo Estatal de Personas Mayores, celebrada en el Imserso.
Respecto al coste que finalmente tendrá el tratamiento una vez se financie, la ministra de Sanidad en funciones no ha querido entrar a detallarlo, comentando que aunque ya hay unas estimaciones, todo va a depender del volumen de personas que muestren esta "voluntad e intención real" de querer dejar de fumar.
Dicho esto, Carcedo ha insistido en que la toma de este medicamento es una "ayuda más" para abandonar el hábito tabáquico y para que el tránsito que tiene que pasar un fumador a convertirse en un exfumador sea "más cómodo". Además, ha destacado la importancia que tiene la ayuda psicológica de los profesionales sanitarios para lograr dejar de fumar.
"Con lo que aporta este nuevo medicamento se dispone de un arsenal terapéutico suficiente para ayudar a las personas. Los profesionales sanitarios saben cómo enfocar estos temas, en qué casos está indicado y cómo hay que manejarlo. No es una cuestión de que vayas a la farmacia y te tomes la pastilla, es una cuestión diferente y, por eso, lo hacemos a través del SNS con las consultas sanitarias que están preparadas para el abordaje de estos tratamientos y para ayudar a la persona a abandonar esta adicción", ha apostillado Carcedo.
Finalmente, la ministra de Sanidad en funciones ha reiterado la voluntad de su partido político, y del actual Gobierno, de actualizar las actuales leyes antitabaco porque, con las "nuevas realidades", se han quedado "cortas". "Cuando haya una legislatura estable abordaremos esta actualización de las leyes ajustarlas a la realidad de hoy en la que han aparecido nuevos dispositivos de consumo de tabaco y de fumar que son muy perjudiciales para la salud", ha zanjado.
